La noche del 7 al 8 de septiembre será especial. El cielo regalará un espectáculo astronómico cargado de simbolismo: un eclipse lunar total. La Luna se teñirá de rojo, fenómeno conocido como Luna de Sangre, y no volverá a repetirse hasta 2026.

Durante la noche del 7 de septiembre se producirá un eclipse lunar total, conocido como Luna de Sangre. Este fenómeno es considerado un portal energético ideal para liberar lo viejo, sembrar intenciones y atraer abundancia. Te compartimos cinco rituales simples para aprovechar su poder.

La noche del 7 al 8 de septiembre será especial. El cielo regalará un espectáculo astronómico cargado de simbolismo: un eclipse lunar total. La Luna se teñirá de rojo, fenómeno conocido como Luna de Sangre, y no volverá a repetirse hasta 2026.
Desde la astrología, los eclipses marcan momentos de transformación. Funcionan como portales que invitan a soltar cargas, cerrar ciclos y sembrar nuevas intenciones. La energía disponible es intensa y puede potenciar los procesos de cambio personal.
En este marco, diferentes corrientes espirituales recomiendan rituales sencillos para conectar con el eclipse. No requieren más que predisposición y elementos fáciles de conseguir. A continuación, cinco propuestas que combinan introspección, gratitud y manifestación.

La vela blanca simboliza pureza y claridad. Encender una durante el eclipse ayuda a limpiar la energía y enfocar la mente. El fuego se convierte en aliado para disolver miedos, bloqueos o patrones que frenan la evolución personal.
Para realizarlo, basta con encender la vela en un lugar tranquilo. Cerrá los ojos, respirá profundo y pensá en aquello que deseás dejar atrás. Podés acompañar la práctica con frases como: “Libero lo que ya no vibra conmigo”.
Este ritual es recomendado como primer paso de la noche, ya que despeja el camino para lo que vendrá después. Su sencillez lo convierte en una práctica accesible para todas las personas.
La escritura es poderosa cuando se trata de fijar objetivos. Durante el eclipse, tomar papel y birome sirve para plasmar intenciones en el presente. Al escribirlas, se anclan en la mente y se proyectan al universo.
Se recomienda usar tinta azul para la claridad o roja para la pasión. Las frases deben expresarse en tiempo presente, con afirmaciones positivas. Por ejemplo: “Tengo un trabajo que me inspira” o “Disfruto de relaciones saludables”.
El papel puede guardarse como recordatorio o quemarse, entregando así el pedido al universo. Este gesto refuerza el acto de soltar y confiar en el proceso.

El laurel es símbolo de victoria, abundancia y protección. En rituales, sus hojas secas funcionan como catalizador de energía positiva. Quemarlas permite abrir caminos y atraer nuevas oportunidades.
El procedimiento es simple: encendé una hoja a la vez, enfocando la intención en aquello que deseás liberar. El humo se lleva las trabas y deja espacio para lo nuevo. Al finalizar, es clave agradecer, ya que la gratitud multiplica los efectos.
Muchas personas utilizan este ritual en temas laborales o económicos, pero también es válido para el plano personal o espiritual.
La sal es un purificador natural presente en múltiples tradiciones. Durante el eclipse, realizar un lavado energético de manos simboliza cortar con lo que no debe seguir acompañando.
Para hacerlo, mezclá un puñado de sal con agua en un recipiente. Frotá tus manos visualizando aquello que necesitás soltar y luego enjuagalas. La sensación de alivio llega de inmediato, como si una carga se hubiera disuelto.
Este ritual puede repetirse al inicio o al final de la noche. Funciona como cierre perfecto después de los ejercicios de intención.
El eclipse también puede aprovecharse para activar la prosperidad en todas sus formas: material, emocional, espiritual y física. La clave es encender una vela dorada, rodearla de hojas de laurel y sumar un billete o piedra con valor simbólico.
Mientras la vela arde, pronunciá frases como: “Activo la energía de la abundancia en mi vida”. Una vez consumida, guardá el billete o piedra como amuleto personal.
Este ritual simboliza la apertura a recibir, pero también invita a reconocer la abundancia que ya existe en el presente.
La Luna de Sangre de septiembre no será solo un espectáculo visual. Para quienes se abren a su energía, representa un momento de introspección, limpieza y siembra de intenciones.
Cada ritual puede realizarse de manera individual o combinada. Lo más importante es la conexión personal y el sentido que se le otorgue a la práctica. El eclipse recuerda que siempre es posible empezar de nuevo y manifestar lo que se desea.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.