Un hombre de 26 años fue deportado y vetado de Singapur luego de abalanzarse sobre la cantante Ariana Grande en la alfombra roja del estreno de Wicked: For Good. El incidente ocurrió el 13 de noviembre durante la premiere asiática de la película.
Tenso momento
El hombre que acosó a Ariana Grande fue deportado y no podrá volver a Singapur
El incidente ocurrió durante el estreno asiático de Wicked: For Good. El agresor, un joven australiano reincidente, fue detenido y condenado por generar disturbios públicos.
El agresor, identificado como Johnson Wen, logró saltar una valla de seguridad y tomó por sorpresa a la artista. La actriz Cynthia Erivo, compañera de elenco de Grande, intervino rápidamente para separarlos. Wen fue arrestado al día siguiente y condenado a nueve días de prisión por causar disturbios públicos.
Un reincidente en actos contra celebridades
Wen ya había protagonizado hechos similares en el pasado. En junio irrumpió en el escenario durante un concierto de Katy Perry en Sídney. Según medios locales, el joven intentó colarse dos veces en la premiere de Wicked antes de lograr su objetivo.
Durante el juicio, el juez Christopher Goh sostuvo que el acto fue “una búsqueda de atención” y remarcó que Wen creyó erróneamente que sus acciones no tendrían consecuencias.
Tras cumplir su condena, el organismo de migración de Singapur confirmó que Wen fue expulsado del país y tiene prohibido reingresar.
El trasfondo emocional: Manchester 2017
El episodio generó una fuerte indignación en Singapur y entre los seguidores de Ariana Grande. Muchos recordaron el atentado en el estadio Manchester Arena de 2017, donde un ataque suicida al término de un show de la artista dejó 22 muertos y cientos de heridos. Grande ha relatado públicamente que sufrió estrés postraumático desde entonces.
Aunque Ariana no se pronunció sobre el incidente, Cynthia Erivo habló con la cadena NBC: “Solo quería asegurarme de que mi amiga estuviera bien. No sabía si el hombre tenía malas intenciones, pero en esas situaciones uno no puede arriesgarse”.
La seguridad en eventos con celebridades vuelve a estar bajo la lupa. Esta vez, el desenlace fue controlado, pero el trasfondo no deja de ser inquietante.
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