Ailén Yanina Garnica fue asesinada a sangre fría en las calles de su barrio, La Ranita, en el extremo noroeste de la ciudad de Santa Fe. Le dispararon el jueves 25 de enero de 2024, cuando caminaba junto a una amiga para hacer un mandado, en inmediaciones del cruce de calles Chubut y Larrechea. Murió dos días más tarde, a pesar de los esfuerzos de los médicos del Hospital Iturraspe.
El día del ataque fue arrestada una mujer, que fue acusada del hecho. Este miércoles, en la zona céntrica de Santa Fe, cayó un hombre que permanecía prófugo desde entonces. La Policía de Investigaciones lo encontró en la "plaza de las palomas" de la capital provincial. Aparentemente, alguien lo reconoció y dio aviso a los uniformados.
Ailén tenía 23 años y fue ejecutada de un tiro en la cabeza. Por su crimen, fue arrestada inmediatamente Yanina Soledad López (33), a quien todos conocen como "La Tatu".
Deuda
Según contó en audiencia la fiscal del caso, la doctora Luciana Escobar Cello, instantes después de la agresión, gran cantidad de vecinos llamaron a la Central de Emergencias 911 y señalaron que los disparos contra la víctima habían "salido" del kiosco o de la casa de "La Tatu".
La joven agonizó por dos días en el Hospital Iturraspe, donde finalmente dejó de existir.
La amiga de Ailén que estaba con ella durante la balacera habría declarado que ambas habían salido a comprar pan y hamburguesas para cenar y todo pasó cuando se dirigían de regreso a la casa de la víctima, donde estaba su hijo de 2 años. Fue entonces que la joven se desvió para ir al domicilio de López para buscar un "faso" fiado.
Ailén era adicta desde los 16 años y tras haber sido madre intentaba dejar atrás el problema. En ese momento, sólo consumía marihuana, según contaron sus conocidos. Señalaron, también, que solía comprarle a la "Tatu", a pesar de las "broncas" que había entre ellas.
Ráfaga
La testigo indicó que cuando se encaminaron a buscar al pequeño, que se encontraba a media cuadra, en la vereda, bajo el cuidado de otra amiga de su mamá, la "Tatu" las increpó. Quería que le pagaran en ese momento.
Discutieron, forcejearon y la mujer, a quien tanto la testigo como los vecinos señalan como "narco", sacó un arma de fuego de su cintura y comenzó a disparar. Tres hombres, incluido su marido, se unieron desde el kiosco, desatando una ráfaga de balas.
Las jóvenes intentaron huir, pero un proyectil alcanzó a Ailén en la cabeza, que cayó desplomada.
Al requisar el inmueble de la sospechosa, la policía encontró un trozo compacto de marihuana de 819 gramos, marihuana fraccionada, celulares, 5 cartuchos calibre .38 y 5 cartuchos calibre 9 milímetros.
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