"Fue clave la rápida decisión de la directora al llamar a la policía", dijo hoy la jefa de la Unidad Regional I, Margarita Romero, al ser consultada sobre el preocupante episodio ocurrido el lunes en la escuela Ceferino Namuncurá, cuando un alumno de primer año fue sorprendido con un arma de fuego dentro de su mochila.
El hecho motivó un rápido despliegue policial que culminó con el secuestro de tres armas en total, una de ellas una escopeta recortada.
"La directora de la escuela se comunicó con la central de emergencias 911". Crédito: Pablo Aguirre
La jefa policial brindó detalles sobre el procedimiento. "La directora de la escuela se comunicó con la central de emergencias 911 dando cuenta de que un alumno se había presentado con un arma. Se comisionaron móviles del Comando Radioeléctrico, y ya en presencia de los directivos, se requisó la mochila del menor, hallando una pistola calibre .45 sin cargador colocado", explicó.
Alertados, los policías también entrevistaron al padre del chico y al propio menor, quien reveló que en la casa de su madre habría más armas de fuego. Ante este dato, los agentes se trasladaron al domicilio indicado, ubicado en barrio Abasto.
"Se le pidió permiso a la dueña para hacer una requisa. Ella accedió sin inconvenientes, y se procedió al secuestro de otras dos armas: una pistola 9 mm y una escopeta recortada calibre 16, además de cartuchos varios", detalló Romero.
"Problemas con sus compañeritos"
Consultada sobre el motivo por el cual el chico habría llevado el arma a la escuela, la funcionaria indicó: "Él manifestó que tenía algunos problemas con compañeritos, por eso la llevó, pero dijo que no estaba municionada".
Respecto al origen de las armas, Romero aclaró que ninguna de ellas era legal. "No estaban registradas, por eso se dispuso el secuestro de las mismas y el inicio de una investigación, que está siendo llevada adelante por la fiscalía en conjunto con la comisaría correspondiente".
Se comisionaron móviles del Comando Radioeléctrico. Gentileza
Sobre cómo se descubrió la situación, la jefa policial relató que "el chico había estado mostrando el arma a otros compañeros, quienes dieron aviso a la maestra y luego al equipo directivo. De inmediato llamaron al 911".
Al ser consultada sobre si estos episodios son frecuentes, Romero fue enfática: "No, por suerte son hechos muy aislados. En el año y medio que llevo al frente de la Unidad Regional I, es el segundo caso que se presenta en un ámbito escolar".
Finalmente, destacó el accionar de las autoridades escolares: "Fue clave la rápida decisión de la directora al llamar a la policía. Estos temas deben abordarse también desde el ámbito familiar, con control y concientización", culminó.
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