Por Danilo Chiapello
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Hugo Denis (31) llevaba una vida simple y sencilla.
Pero desde ayer a la tarde se convirtió en "el hombre" del caso Matías Causso, ya que su intervención permitió hallar al adolescente desaparecido hace 8 meses.
Una obra de bien
Lo que sigue es el relato de Hugo narrando los pormenores del hallazgo.
"Esta historia comenzó hace ya un tiempo largo cuando mis patrones tuvieron la inquietud de hacer una obra de bien". Cabe señalar que Hugo Denis se desempeña como empleado en los negocios (una zapatería y una boutique) que regentean Rubén Jantzon y su yerno Lisandro Leoni.
"Tras buscar en distintas direcciones se pusieron en contacto con Missing Children. Me habían comentado que le iban a mandar un póster con la imagen de un chico que estaba perdido", contó.
"Ayer, mi patrón, Rubén, me alcanza el póster y me dice que lo pegue en las vidrieras de los comercios. Pero cuando observo la imagen casi me muero de la sorpresa. Salí corriendo y le dije a Rubén: ¡El chico de la foto vive frente a mi casa y juega con mi hijo todos los días!.
"Y así fue nomás. Era Matías. Vive en el barrio 1º de Mayo, en Chacra 116. Es una zona muy tranquila, casi residencial te podría decir.
"El dueño de casa es un señor de nombre Lino. Una muy buena persona. Él tiene un bar en la zona de playa de Ituzaingó, en la provincia de Corrientes. Creo que allí conoció a Matías.
"Luego Lino lo reencontró a Matías en la terminal de Posadas. Estaba durmiendo en un banco, en una situación de desamparo total. Entonces le ofreció ayuda. Se lo llevó a su casa y allí comenzó todo.
"Lino lo trató como un hijo. Jamás lo vimos a Matías que tenga que trabajar ni nada. Él llegó allí en los primeros días de enero. Está en perfecto estado. En todos estos meses, se hizo muy amigo de mi hijo, Juancito. Jugaban a la pelota casi todo el día, corrían, en fin, las cosas y travesuras que hacen los chicos. Se divertían mucho".
Paradoja
Para esta parte, Hugo hizo un alto en su relato y su voz se puso un tanto melancólica.
"Debo decir que ahora estoy un poco triste porque sé que se lo van a llevar. Pero qué se le va a hacer. Tiene que ser así. Esto es una cuestión de justicia.
"Lo que pasa es que a mí esta historia me pegó muy fuerte porque yo también quedé huérfano de chico. Me ganaba unos pesos en la calle.... Fui lustrabotas, canillita, hice muchas cosas. La única diferencia que tenemos es que a mí nadie me obligó a trabajar. Para terminar te digo que aquí ha metido la mano Dios. Yo no creo en las casualidades. Pero las cosas pasan por algo. Justo yo, también huérfano, debí encontrar a Matías...".
"Tiene protección legal"
El juez de instrucción Nicolás Falkenberg viajó con destino a Posadas junto a una comisión de la Secretaría de Derechos Humanos.
En pleno viaje narró cómo llegó a él la noticia y los pasos a seguir. "Cuando los misioneros reconocen a Matías en el póster se ponen en contacto con su padre, Alejandro Causso. Por supuesto que él (Alejandro) no me dice nada y sale para allá. Por suerte el dato se filtró y entonces comenzamos a movernos con cuidado para que Matías no escape de nuevo. Luego me comuniqué con el padre y lo persuadí para que regrese, cosa que así ocurrió. Le expliqué que por prudencia no debía estar allí, porque se arruinaría todo. Le expliqué que el juez de Posadas no lo iba a dejar tomar contacto. Entonces se volvió. Sé que Matías ya declaró en sede policial. Ahora resta que yo haga las constataciones del caso y regresaremos juntos. Ya dispuse todas las medidas para que tenga protección legal".
"Ahora tiene dos familias"
Malvina Cabrera es la tía de Matías. Ya está en Posadas y manifestó lo siguiente: "No puedo hablar de la felicidad que todos tenemos. Ya lo vimos a Matías y está perfecto. Súper contento. Esto que ha ocurrido ha sido un milagro de Dios. Jamás perdimos las esperanzas, pero la lucha fue muy dura. Quiero agradecer a muchos. Al juez, que soportó mis emociones. A todos los que nos ayudaron de cualquier manera. Qué suerte que el chico cayó con gente tan buena. Todos aquí son maravillosos. Le dieron los mejores cuidados y la mejor atención. No lo puedo creer. Ahora Matías tiene dos familias. Nosotros y los de Posadas".
"¡Está re lindo y gordito!"
Priscila (hermana de Matías) también ya está en Posadas. "Ya lo vi y está re bien", dijo entre lágrimas. "Está re lindo y hasta gordito. Nuestro encuentro se produjo de madrugada. Fue en las escalinatas de la Jefatura. Nos abrazamos y nos lloramos todo. Me comentó que está muy contento. Que tiene su ropa, sus cosas, que pudo hacer una vida libre y sin presiones. Que la gente lo protegió mucho y lo cuidaba. Hasta me contó que fue a un casamiento vestido con saco y corbata. Ahora me lo llevo conmigo. Juntos pasamos cosas muy duras. Juntos estuvimos en la calle. Pero ahora nada ni nadie nos va a separar. Esto es una nueva vida".







