Este lunes comenzó en los tribunales santafesinos el juicio oral y público por el crimen de Gastón Nazareno Copes, asesinado en octubre de 2022 en la ciudad de Santo Tomé tras una persecución que tuvo origen en la salida de un boliche en Esperanza.

Este lunes comenzó el debate por el crimen de Gastón Copes, ocurrido en octubre de 2022, tras una persecución a la vuelta de un boliche de la ciudad de Esperanza. La querella destacó como agravantes “la frialdad y el lugar donde se cometió el hecho”.

Este lunes comenzó en los tribunales santafesinos el juicio oral y público por el crimen de Gastón Nazareno Copes, asesinado en octubre de 2022 en la ciudad de Santo Tomé tras una persecución que tuvo origen en la salida de un boliche en Esperanza.
El debate, que se desarrolla ante un tribunal conformado por los jueces Susana Luna, Pablo Busaniche y Pablo Ruiz Staiger, prescindió de los testigos cuyas declaraciones estaban fijadas para la primera jornada y todo quedará librado a lo que se muestre en los videos y registros de audios incorporados a la causa.

Los acusados, Mariano Alberto Caridad (23) -defensa a cargo del Dr. Raúl Sartori- y Agustín Nicolás Coria (24) -representado por Elsa Tracy Dunigan junto a Raúl Sánchez Lecumberri-, están imputados como coautores del delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, y enfrentan penas de hasta 25 años de prisión.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA), representado por los fiscales de Homicidios, Estanislao Giavedoni y de Delitos Complejos, María Laura Urquiza, solicitó 23 años de cárcel para ambos. La querella, en cambio, pidió elevar ese monto a 25 años, señalando como agravantes “la frialdad del crimen y el lugar altamente transitado donde se ejecutó”.
En diálogo con El Litoral, el abogado querellante Martín Peón, representante de la madre y el hermano de la víctima, brindó detalles del caso y del rumbo del debate oral.
“El hecho ocurrió el 23 de octubre de 2022, cuando Copes fue interceptado en la puerta de una heladería, en pleno centro de Santo Tomé. Los acusados bajaron de su auto, lo apartaron del resto de las personas que había en el lugar y lo ejecutaron, cada uno con un arma distinta. Los proyectiles que impactaron en su cuerpo provienen de dos armas diferentes”, explicó Peón.

De acuerdo con el letrado, en el juicio no se discutirá la materialidad del hecho ni la autoría: los imputados fueron captados por diversas cámaras de seguridad, tanto públicas como privadas, en el momento de la agresión.
“La evidencia es contundente. Hay grabaciones de las cámaras de la heladería, de Nexon, y de las calles 7 de Marzo y 25 de Mayo, que muestran el ataque desde varios ángulos. Lo único que se debate ahora es el monto de la pena”, sostuvo.
El crimen de Copes, de 25 años, ocurrió minutos después de las 6 de la mañana del domingo 23 de octubre de 2022, en el cruce de avenida 7 de Marzo y calle 25 de Mayo, conocido popularmente como “Las Cinco Esquinas”, un punto muy transitado de la ciudad.
Horas antes, se había producido una pelea en un boliche bailable de la ciudad de Esperanza, donde comenzaron las hostilidades entre la víctima y los acusados. Según la hipótesis fiscal, tras la discusión en el boliche, los imputados siguieron a Copes hasta Santo Tomé a bordo de un Chevrolet Cruze gris.

El vehículo fue visto más tarde circulando a alta velocidad y en contramano por calle San Martín. Fue perseguido por otro auto conducido por una mujer que avisó a la policía que desde el Cruze se habían efectuado disparos frente a la heladería Veneto.
La víctima, que se encontraba junto a un amigo y dos amigas, fue atacada cuando descendía de su auto. Al intentar escapar corriendo, tropezó y cayó. Fue entonces cuando ambos agresores le dispararon en reiteradas ocasiones, provocándole heridas graves.
Copes falleció el 5 de noviembre en el hospital Cullen, luego de dos semanas de agonía.
En la audiencia de apertura, las partes acordaron que no se cuestionará la responsabilidad de los acusados en el crimen. Por lo tanto, el juicio se centra exclusivamente en la definición de la pena.
“La defensa nunca aceptó una condena específica, por eso se llegó a juicio”, explicó Peón. “Nosotros creemos que la pena debe ser de 25 años para cada uno por la brutalidad del crimen, por haberse cometido en un lugar público y con total desprecio por la vida”, agregó.
Las audiencias se reanudarán el miércoles con la exhibición de videos y registros de audios al tribunal, en tanto que los alegatos están previstos para el viernes 24 de octubre, y la sentencia se conocería la semana próxima.
La investigación fue avanzando rápidamente tras el ataque. El primero de los acusados, Mariano Caridad, fue detenido el mismo día del crimen en el barrio Las Vegas, donde se secuestró el automóvil usado en la persecución.
En su interior había un cartucho percutado, otros sin usar, y vestimenta que sería clave en la causa. El segundo sospechoso, Agustín Coria, se entregó días después en la sede de Homicidios, acompañado por un abogado.

En diciembre de 2022, ambos fueron formalmente imputados por “homicidio calificado agravado por el uso de arma de fuego en carácter de coautores”.
Con el juicio en marcha y las pruebas en plena reproducción, el caso entra en su recta final. Será el tribunal quien determine la magnitud de la condena para los acusados de este crimen que conmovió a Santo Tomé.
“La ejecución de Copes fue filmada desde varios ángulos. No hay duda de lo que pasó ni de quiénes lo hicieron. Lo que estamos discutiendo ahora es cuántos años van a pasar presos”, concluyó el querellante.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.