Es cada vez más habitual encontrar en dietéticas mezclas especiales de yerba mate con hierbas funcionales, en lo que se conoce como “yerba mate compuesta”

Descubrí cómo potenciar tu mate con hierbas para combatir el acné, mejorar la digestión y equilibrar el organismo en un ritual saludable.

Es cada vez más habitual encontrar en dietéticas mezclas especiales de yerba mate con hierbas funcionales, en lo que se conoce como “yerba mate compuesta”
Esta nueva forma de tomar mate no solo suaviza el sabor tradicional, sino que añade beneficios concretos para la salud. Hay dos plantas que cobran protagonismo: el toronjil (melisa) y el boldo.

El toronjil o melisa ofrece una combinación única: calma el sistema nervioso, aporta un suave aroma cítrico y es una aliada para la piel propensa a granitos
Beneficios para la piel y el cuerpo:
Combate el acné: Sus propiedades antiinflamatorias ayudan a reducir brotes irritados.
Refresca el sabor: Su toque ácido suaviza el amargor de la yerba mate.
Incorporarla es tan sencillo como añadir unas hojitas secas al fondo del mate antes de cebar. Se puede usar una yerba blend que ya la incluya o hacerlo manualmente.

El boldo es reconocido por su efecto hepatoprotector y digestivo. Añadir unas hojas en el mate favorece la eliminación de toxinas y ayuda al hígado y al aparato digestivo
Además, su uso regular puede contribuir a:
Purificación natural: estimula la formación de bilis, favoreciendo la depuración hepática.
Alivio digestivo: ayuda con la hinchazón, los gases y los malestares estomacales.
Ligero efecto sedante: aporta un estado de calma al organismo.
Tomar mate con boldo por la tarde o noche puede convertirse en un ritual depurativo ideal para cerrar el día.
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