El día que el “Mono” Olivares
se “hizo el loco” frente a Gatti
Fue el último clásico del 75 y se lo recuerda como el del gol de Olivares. Error del gran arquero que tenía Unión y el “Mono”, atento, no perdonó. Fue en ese 1975 inolvidable para el fútbol de Santa Fe.
El momento en el que Daniel Olivares remata al arco para superar el esfuerzo de Gatti y los defensores de Unión que intentaron desviar el remate. Iban apenas 6 minutos del clásico de hace 50 años.
Siempre decimos que hay partidos que se recuerdan por una acción en particular. Y así, de esa manera, perduran en el tiempo. El gol de Madelón en 1989, el de la Chiva Di Meola en el de 1977 o el del Turco Alí en la última jugada del partido en cancha de Colón, si es que hablamos de clásicos.
El 26 de octubre de 1975, hace 50 años, se disputaba una fecha de interzonales en el fútbol argentino. Era el Nacional de ese año, que terminó ganando River, quien ya se había sacado la “mufa” de los 18 años sin éxitos, con la conquista del Metropolitano. Unión y Colón realizaban, ese año, una gran campaña. Y tenían dos “equipazos”. De un lado, el Unión del Toto Lorenzo que había causado sensación. Y por el otro, el Colón del Gitano Juárez, luego reemplazado por Rubén Cheves en ese torneo Nacional.
El Rodrigazo de junio de ese año, había permitido que el esfuerzo económico de Unión por traer semejante cantidad de figuras, no fuera tan pesado. Los jugadores fueron adquiridos en cuotas, en un trabajo de “ingeniería económica” muy particular que hicieron Corral, Baldi, Veglia y compañía, quienes manejaban el fútbol de Unión. Y la venta de Luque a River (780 millones de pesos moneda nacional, la más alta de la historia del fútbol argentino hasta ese momento, superando a la de Kempes de Instituto a Rosario Central) le había dado el respiro económico suficiente.
El "Mono" cambió los planes de Unión
Se jugaba el último clásico del año en cancha de Colón. En el Metro, había sido empate 0 a 0 en Unión y victoria 3 a 2 de Colón en su cancha. En el Nacional, el partido en cancha de Unión había terminado 1 a 1 (el gol de Iman sobre el final del partido para igualarlo) y se disputaba el cuarto partido en esa vuelta de Unión a la primera categoría después del descenso de 1970. Unión venía de empatarle en su cancha a Independiente 3 a 3 y Colón había perdido 3 a 2 con Racing en Avellaneda. Y volvían a verse las caras en el Centenario.
El Mono junto a Edgar Fernández y el Bambi Araos, dos excelentes marcadores de punta de aquellos tiempos en Colón, que jugaron ese clásico del 1 a 0.
Colón tenía a un jovencito llamada Daniel Olivares, que había debutado con 16 años y 3 meses en la primera de Colón en 1972. Era un delantero astuto, pícaro, que sabía cómo complicar a los defensores rivales más allá de no tener una fortaleza física importante. En ese 1975, el Flaco Menotti lo había convocado para jugar el torneo Esperanzas de Toulon, en Francia.
En ese torneo, entre los 16 convocados por Menotti, los mayores eran Daniel Passarella (River) y José Luis Pavoni (Newell’s), ambos de 21 años. El plantel se completaba luego con Ricardo Ferrero y José Van Tuyne (Central), Aldo Espinosa (Huracán), Marcelo Trobbiani y Alberto Tarantini (Boca), Américo Gallego, Jorge Salas y Jorge Valdano (Newell’s), Daniel Olivares (Colón), Jorge Forgués (Platense), Rubén Giordano y Carlos Suárez (Racing), Armando Quinteros (Vélez) y José Daniel Valencia (Gimnasia y Esgrima de Jujuy).
Llegó aquel 26 de octubre de 1975 y el Toto Lorenzo armó una estrategia muy particular, disponiendo de varias marcas a presión, casi personales, en distintos sectores de la cancha. Zuccarini, Jáuregui, “Batata” Merlo, Bottaniz, Suñé y Sacconi estuvieron destinados a un sistema defensivo que a los 6 minutos de empezado el partido, sucumbió. Agarró la lanza el “Indio” Mántaras, se proyectó al ataque, nadie lo marcó y remató de manera violenta, la pelota no pudo ser retenida por Hugo Orlando Gatti y el rebote fue capitalizado por el “Mono” Olivares, para abrirse un poquito hacia el costado y desde allí convertir el único gol del partido.
“En el poblado mediocampo, sobresalió nuevamente la figura principalísima de “Cococho” Alvarez, figura en el manejo de la pelota, bien acompañado por Mazo y Zimmermann, con un muy buen trabajo ofensivo de Olivares y la participación de Borgna, que encajó perfectamente en el esquema que ideó Colón...”, fue lo señalado por El Litoral, que en el título fue simple y contundente: “Olivares rompió el plan del rival”.
Dos equipos llenos de figuras
El árbitro de aquel clásico fue Roberto Goicoechea y Colón alistó esa tarde de hace 50 años a Baley; Araos, Mariano, Mántaras y Fernández; Mazo, Zimmermann y Alvarez; Coscia, Saldaño y Olivares. Luego entraron Borgna por Saldaño e Iman por Coscia. Por su parte, Unión lo hizo con Gatti; Zuccarini, Trullet, Jáuregui y Merlo; Sacconi, Suñé y Bottaniz; Mastrángelo, Marchetti y Bravi. Luego entraron Oscar Víctor Trossero por Jáuregui y Marasco por Bravi. Fueron expulsados Zuccarini y Marasco, por el lado de Unión y Mariano por el de Colón.
El Mono Olivares, uno de los más jóvenes en debutar con la rojinegra de Colón, junto a José Luis Burtovoy y Ramón Zanabria, que en ese entonces jugaban en Unión. Foto: El Litoral
Esto ocurrió hace medio siglo y en el fútbol pasaban cosas que hoy, ni por asomo, podrían darse. El ejemplo claro lo dio el “Bambi” Araos, ese brillante marcador lateral rojinegro durante muchos años. “Yo quería jugar este clásico, por eso me levanté y me fui a correr al Parque Sur para ver cómo me sentía. Afortunadamente pude jugar y aguantar los 90 minutos, pero creo que ahora voy a tener que pararme”, dijo el “Bambi”. ¡Por el Parque Sur, corriendo solo y a horas de jugar un partido clásico! ¿Se lo imagina en estos tiempos?, seguro que no.
El partido de reserva tuvo como dueño al equipo visitante. Unión venció a Colón por 2 a 0 con goles de Rito Fernández y Paiva. Colón formó con Erni; Fertonani, Leroyer, Artigues y Strada; López, Báez y Bon; Funes, Jorge González y Solís. Luego entraron Cicconi y Busca en el equipo que dirigía el recordado Justo José Rossi, el “Pato”, padre de Rubén Rossi, cuatro años más tarde campeón del mundo juvenil con la selección argentina de Menotti.
Unión, en tanto, lo hizo con Febre; Hugo López, Regenhardt, Mazzoni y Barro; Anconetani, Davies y Retamar; Rito Fernández, Bassita y Paiva. Luego entraron “Cachito” Roteta y Benavídez.
En ese momento, al país lo gobernaba Isabel Martínez de Perón, que una semana después del partido debió ser hospitalizada, en tanto que el Generalísimo Franco pasaba sus últimos días de vida en Madrid y Henry Kissinger (secretario de Estado norteamericano) y Valery Giscard eran elegidos los hombres del año en París.
Al día siguiente de aquel partido en cancha de Colón, se produjo un tornado en Salto que dejó como saldo la muerte de cuatro obreros que trabajan en la represa Salto Grande, muy cerquita de Concordia.
Unión salió quinto en la zona C de ese torneo y Colón cuarto en la D. Ninguno de ellos clasificó para el octogonal final, que dio como resultado el bicampeonato de River, que en el último partido le ganó 2 a 1 a Rosario Central en la cancha de Newell’s.
Se pagó julio completo
De acuerdo a lo averiguado por El Litoral, la dirigencia de Colón procedió a abonar la totalidad de los sueldos de julio (la parte de Afa y los derechos de trayectoria) al plantel profesional. Es decir que, en este momento, ya son exigibles los meses de agosto y setiembre, aunque la parte de Afa, de ambos meses, ya se ha abonado. Resta lo más suculento, que es la parte de derechos de trayectoria.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.