Suárez, tras la aprobación del presupuesto: “Hay que celebrar estos niveles de institucionalidad”
El concejal de la UCR afirmó que la aprobación del Presupuesto y la Ordenanza Tributaria para 2026 brinda a la ciudad “una hoja de ruta” clara para la gestión municipal y permite ejercer el control sobre la administración. Resaltó su carácter clave para afrontar la disminución de recursos nacionales.
El concejal Carlos Suárez calificó la aprobación del Presupuesto Municipal 2026 y la Ordenanza Tributaria como “un paso fundamental” para la gestión de gobierno municipal. En su discurso ante el Concejo, afirmó que “este presupuesto es la hoja de ruta de la gestión municipal para el año 2026” y resaltó que con su sanción “hemos dotado a la ciudad de la ordenanza más importante”.
Suárez destacó que, pese a las diferencias puntuales, el cuerpo legislativo logró “un consenso mayoritario” que permitió sancionar la ordenanza. Sostuvo que “tener el presupuesto aprobado es muy importante”, ya que permite al municipio planificar con certidumbre y ejercer control sobre la administración pública.
Carlos Suárez, concejal.Crédito Flavio Raina.
“Este presupuesto habla de una municipalidad que prevé un gasto eficiente y eficaz de sus recursos”, remarcó el concejal. Según su interpretación, esa eficiencia es clave ante el contexto económico actual, marcado por restricciones y desafíos presupuestarios.
Suárez también advirtió sobre la caída prevista en la coparticipación nacional, que pasaría de 30 a 28 puntos: “esos dos puntos reflejan casi 4.000 millones de pesos para la ciudad”, subrayó. Esa pérdida, sostuvo, equivale al costo estimado de una de las áreas de gestión planificadas, lo que refuerza la necesidad de contar con un presupuesto aprobado para garantizar obras y servicios.
Adriana "Chuchi" Molina, presidió la sesión donde se aprobó el presupuesto. Foto: Manuel Fabatía.
En cuanto a la ordenanza fiscal, el concejal justificó los ajustes previstos por la inflación: reconoció que los incrementos “no son una noticia que le guste a nadie”, pero definió que los aumentos “están limitados” y que constituyen un “esfuerzo razonable” para que el municipio pueda cumplir con sus responsabilidades sin comprometer la sustentabilidad financiera.
Para Suárez, la sanción de estas normas representa “una herramienta de gestión y también de control”. Además valoró el proceso como una expresión de institucionalidad: “podemos decir con orgullo que hace muchos años encontramos caminos de discusión, de consenso y también de diferencia”.