En un giro relevante para el esquema cambiario, el Banco Central comunicó que, a partir de enero, las bandas de flotación del dólar dejarán de moverse con una regla fija y pasarán a ajustarse mes a mes siguiendo la inflación.

Desde el 1 de enero de 2026, el piso y el techo de las bandas cambiarias se moverán cada mes según el último dato de inflación del Indec. Además, se anunció un esquema de compra de reservas ligado a la demanda de dinero, con un tope potencial de hasta USD 17.000 millones.

En un giro relevante para el esquema cambiario, el Banco Central comunicó que, a partir de enero, las bandas de flotación del dólar dejarán de moverse con una regla fija y pasarán a ajustarse mes a mes siguiendo la inflación.
La medida implica que tanto el piso como el techo de la banda evolucionarán cada mes al ritmo del último índice de inflación mensual informado por el Indec, con impacto directo sobre la referencia del mercado oficial.

La autoridad monetaria enmarcó el cambio en una nueva etapa del programa, con foco en la “re-monetización” de la economía y en la acumulación de reservas internacionales, tras un período que describió como de mayor estabilidad.
En ese marco, el BCRA planteó como proyección central una expansión de la base monetaria desde el 4,2% del PBI hasta el 4,8% hacia el cierre de 2026, atada a un aumento de la demanda de dinero.
Para fortalecer el stock de reservas, el Central anticipó compras por alrededor de USD 10.000 millones si se consolida el escenario base. Y dejó abierta la posibilidad de escalar hasta USD 17.000 millones si la demanda de dinero sube un 1% adicional del PBI.

El esquema, según lo informado, buscará adaptarse a la liquidez diaria del mercado: las compras representarían el 5% del volumen operado cada jornada, con margen para adquisiciones puntuales de mayor tamaño si se busca evitar distorsiones.
La decisión abre una etapa donde el termómetro inflacionario no solo ordenará precios, sino también el corset del dólar. Con 2026 en el horizonte, el Banco Central apostó a que la estabilidad no sea una foto, sino una rutina.