Miércoles 4.12.2019
/Última actualización 9:43
El presidente iraní, Hasan Rohani, insistió este miércoles en que el país está todavía preparado para negociar con Estados Unidos junto al resto de los miembros del acuerdo nuclear siempre y cuando ese país levante "todas sus sanciones injustas contra Irán".
"En el momento en el que Estados Unidos levante todas sus sanciones injustas, incorrectas, crueles y terroristas contra Irán, los jefes del 5+1 podrían reunirse inmediatamente", dijo Rohani en un discurso televisado durante una conferencia en Teherán.
El mandatario se refirió así a los seis países signatarios del acuerdo nuclear, que limita el programa atómico iraní a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales: EEUU, Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania.
El presidente estadounidense, Donald Trump decidió, sin embargo, en mayo de 2018 abandonar de modo unilateral el pacto y volver a imponer sanciones a Irán, por lo que un año después las autoridades iraníes optaron por reducir gradualmente sus compromisos nucleares.
"No hemos cerrado la puerta a las negociaciones", subrayó Rohaní, quien siempre ha incidido en esta postura pese a que el líder supremo, Alí Jameneí, ha sido más tajante en rechazar cualquier tipo de diálogo con Washington.
Para el líder iraní, las sanciones son "un acto cruel de la Casa Blanca" y que Irán no tiene "más remedio que resistir", informó la agencia de noticias EFE.
En relación a las negociaciones que culminaron con la firma del histórico acuerdo, llamado JCPOA por sus siglas en inglés, Rohani recordó la conversación telefónica que mantuvo con el entonces presidente estadounidense, Barack Obama.
Esa conversación -continuó- fue "una locomotora altamente poderosa para impulsar el tren de las negociaciones" y permitió a las partes alcanzar un acuerdo provisional sobre el caso nuclear de Irán.
Según Rohani, en esa llamada le dejó claro a Obama que por el momento solo iban a negociar sobre la cuestión nuclear pero que si EEUU implementaba bien el acuerdo se podrían poner "los otros dos temas en la agenda", aludiendo a los programas de misiles balísticos de Irán y su influencia regional, mediante el apoyo al régimen sirio o al grupo libanés Hezbollah.
En respuesta a las sanciones de EEUU y al fracaso del resto de firmantes en contrarrestarlas, principalmente los europeos, Irán tomó una serie de medidas como superar los límites permitidos en el acuerdo al almacenamiento y enriquecimiento de uranio.
El histórico pacto se encuentra en la cuerda floja y será una de las prioridades del argentino Rafael Grossi, nuevo director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), agencia con la que Irán sigue cooperando y permitiendo sus inspecciones.
Pese a todo, el negociador nuclear iraní y viceministro de Exteriores, Abas Araqchí, reiteró este miércoles en una visita a Japón que el objetivo de Irán es "no abandonar el JCPOA" y que su país volverá a cumplir con todos sus compromisos si se garantizan sus beneficios económicos recogidos en el pacto.