En la madrugada del 6 de marzo de 2025, en la ciudad de Rosario, falleció Jorge Walter Peyrano.
Por Ateneo de Derecho Procesal del Litoral Eduardo B. Carlos
En la madrugada del 6 de marzo de 2025, en la ciudad de Rosario, falleció Jorge Walter Peyrano.
Fue profesor titular de la cátedra de Derecho Procesal Civil en la Universidad de Rosario, en la sede Rosario de la facultad de Universidad Católica Argentina, y por razones personales por poco tiempo en nuestra Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional del Litoral (UNL). En dichas ocasiones por concurso académico.
Integró numerosos jurados académicos en diversas facultades, haciéndolo también en varias comisiones destinadas a las reformas de los códigos procesales civiles. Fue presidente de la Asociación Argentina de Derecho Procesal y miembro de la Asociación Iberoamericana de Derecho Procesal.
Juez de primera instancia desde muy joven, también lo fue de la Cámara de Apelaciones Civil y Comercial, Sala IV de Rosario. Egresó de la Facultad de Derecho de Rosario mereciendo la medalla de oro y fue destinatario del Premio Konex por su labor científica y técnica en el Derecho.
Publicó un sin número de artículos de doctrina en todas las revistas de Derecho, tanto locales como internacionales. Escribió numerosísimos libros de la materia procesal y dirigió otras muchas desde el Ateneo de Derecho Procesal de Rosario, de su propia creación, y de la Federación de Ateneos de Derecho Procesal también de su inspiración.
Dirigió durante más de veinte años el posgrado de Derecho Procesal de nuestra Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL. Dictó conferencias en prácticamente en todo el país y en el extranjero dejando un sinnúmero de instrumentos procesales emergentes de su imaginación que humanizaron la disciplina aportando una clara modernización de la ciencia procesal.
Toda su labor académica, judicial y relacional fue armoniosa, generosa en la trasmisión de sus saberes con la sencillez que caracterizó su quehacer cotidiano. Con simpatía y sin alambicadas argumentaciones supo trasmitir a sus alumnos de grado y de posgrado, la abultada tarea desplegada en el derecho procesal contagiando a muchos de sus discípulos la pasión por el perfeccionamiento de los sistemas procesales.
La procesalística actual le debe la divulgación de un pensamiento científico y técnico de gran trascendencia, siendo todo ello, y muchísimo más, la razón por la que hacemos pública esta lamentable pérdida.
El Ateneo de Derecho Procesal del Litoral Eduardo B. Carlos y la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL lo han de recordar e intentarán alentar a que los abogados, jueces y funcionarios sepan encontrar el sendero que dejara marcado.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.