Raúl Emilio Acosta
Raúl Emilio Acosta
Este mes de julio sirvió para acomodar definitivamente los tantos. Quedaron los mejores en todos los casos. Los votos determinan eso. Los mejores son, sin dudas y por decisión popular, Perotti gobernador, Jatón y Javkin intendentes.
También hay definiciones en las senadurías. Castelló y Lewandowski tenían tareas sociales uno y militancia peronista el otro, pero vienen de un presente mediático que aún no abandonaron. Santa Fe y Rosario en manos peronistas en el Senado.
El que es mediático pero va al ejecutivo es Jatón. Soy lúdico hasta el caracú. Apostaría que se recuesta en la gobernación para sobrevivir. Como consejo diría que no solo es sonreír, es escuchar, debatir y decidir. Ejecutar.
Lewandowski cambió el mapa peronista del sur. Cosechó muchísimos votos. Más que quien lo propusiera, la arquitecta María Eugenia Bielsa. Más que todos. Habrá que vigilar el comportamiento de ésa cámara. Dos peronistas más. Los dos suman más votos que todos los otros senadores juntos. Veremos cuando empiecen a pedir obras senadores como Michlig. Muchos pedidos de todos. El porcentual de votos es básico. Los senadores están o deberían estar satisfechos con la autonomía que tienen. Exigir una alícuota del Poder Ejecutivo (ministros) no haría falta. El sur debe mirar con atención a Lewandowski. Perotti no se esforzará ni un tranco para el tema reelección. Tarea de Lifschitz. Si fuese necesario apostar, que no lo deje afuera a “el gallego” Lewandowski. Ese es su nombre “interno”, por la confianza que da el trabajo periodístico.
El ejecutivo ahora no es bicéfalo. Perotti es Gobernador. Es el jefe provincial del peronismo en el poder. Listo. El 11 de diciembre un solo timbre en la provincia. Según dijo, lo acompañarán los mejores. Si algún sector propone a alguien, la meritocracia vuelve a tener existencia. Tal vez allí estribe la diferencia en el comportamiento provincial y nacional del peronismo. Siempre dentro del territorio. El mérito se da en la provincia por saber, no por obedecer. La segura reducción de ministerios y la reestructuración en la policía son dos puntos que desvelan a los colegas.
Hay una pregunta muy visible: ¿qué hará Bonfatti? Lifschitz es el futuro presidente de la Cámara de Diputados. Un jefe por cada partido... si el radicalismo no propone un manejo compartido de ésa Cámara. Esto desde el 11 de diciembre. Según con cuántos diputados radicales cuente el socialismo puede pensar en una oposición y el desafío: volver.
Explicar su decisión nacional, la de Enriquito Estévez Boero acompañando a Lavagna / Urtubey, decidido en tan poco tiempo, permite una ligera metáfora. Fue un parto en la Sala de Guardia del Hospital, de madrugada. Salió bien. Con cuantos votos. Humm. Lifschitz es uno de los nuestros, de los mejores. Veremos qué pasa con los votos nacionales. No hay compartimentos estancos. De una cosa salió la otra.
La lista peronista de candidatos es responsabilidad de Rossi, Cleri y la jefa.
La de diputados de Mauricio responsabilidad de Mauricio y algún delegado territorial.
Perotti, como Javkin, son dialoguistas. Escuchan a todos. Después resuelven como creen más conveniente. Comparten la situación. El cuerpo deliberativo con mayoría opositora. Comparten más que las actuales autoridades en “rosagasario” y provincia, ambos vienen de la fragua partidaria. Dialoguistas y con pasado partidario. Eso los define.
En Rosario la situación de Javkin ya está dicha pero necesitamos repetirla. Es un radical suelto, ex lilito, ex dirigente estudiantil, ex concejal, diputado provincial y diputado nacional. No es ni será socialista. Mónica Fein es la última intendente socialista y no hubo modo que retuviese, transfiriese o colaborase para una continuidad específicamente socialista. Habrá muchos radicales y jóvenes UNR en su gobierno.
Los otros dos fenómenos populares son tan obvios que nadie los menciona pero serán sustantivos. La candidata a concejala más votada fue Susana Rueda y cambió la mirada en un punto. Es una peronista que adhiere al socialismo. Si de votos se trata, ella es la más votada.
La sorpresa legislativa fue/es Amalia Granata. La Granata cambió la mirada en otro punto. En dos puntos. El pañuelo celeste y las dos vidas existen, pese a los desplantes del periodismo militante y poco amable. Vale muchos votos esa posición. El segundo punto es la boleta única. Granata y Rueda son dos fenómenos populares. De los nuestros lo mejor. Su rostro en la boleta fue fundamental.
SÍGANME LOS BUENOS
La boleta única elimina el costo inusual de todos los partidos. Una sola boleta que provee el Estado. Está bien. Elimina el robo de boletas a los partidos minoritarios o con escasos fiscales. Para 7.000 mesas 14.000 fiscales, comida, logística, fiscales generales. Adiós a eso. Chau. Está bien.
La boleta única no elimina la lista sábana. Un conocido y debajo los que se quiera, que no están anunciados en la “Boleta Única” ni se los promociona. Vale un rostro. Rueda. Granata. Lewandowksi. Jatón. Castelló.
La boleta única es también única por rubro. Bielsa fue más votada que el gobernador Bonfatti. Bonfatti fue más votado que el Gobernador Lifschitz y Lifschitz le ganó a la lista de Perotti y algo más que no se puede esquivar. Amalia Granata integra el juego. De los nuestros una de las mejores. Es su mérito. La votaron mucho. Muy mucho.
La lista única destroza partidos, elimina internas, permite actores independientes y esconde a quienes acompañan al primero, al de la foto, este misterio de los no mencionados aparece en todos los casos.
La boleta única descuartiza coincidencias. La más votada: la Rueda, y el intendente de otro sector: Javkin. Y el senador el recontra super votado: Lewandowski que, aclaramos, es de otro sector.
CUENTAS CLARAS Y POCA AMISTAD
Hay una premura manifiesta en avisar ahora, en julio, que la provincia tiene buenos números. Juanchi Mercier y Walter Agosto son dos fenomenales miembros de anteriores gabinetes (peronistas) que dirían lo mismo: que haya una fiscalización. Miremos los números finos. Con cuánta gente llegaste. Con cuánta te vas. No me pongas como números en azul las cuentas a cobrar porque son eso... a cobrar.
No hay enojos gruesos, hay desconfianzas obvias. Omar Perotti es un CPN que fue intendente, ministro, actualmente es senador nacional, va y viene por los números “macro” y conoce del control de caja diaria.
Otra premura, evidentemente electoralista, es el tema “federalismo”. Como se intenta con palabras finas, no alcanzan a entenderse. Se supone que los próximos gobernantes no cuidarán el federalismo como sí lo hacía el socialismo. No es cuestión de quien escribe resolver ése tema solo apunto: en la provincia se votó el 16 de julio por los mejores de los nuestros, los comprovincianos. Se verá a quiénes se les entrega el voto para que manden en nombre de CFK, de MM o de (milagro de Dios y la Virgen, mediante una avalancha de votos) L&U. Ninguno de ellos santafesino. Ni antes, ni ahora, ni después.
Perotti, como Javkin, son dialoguistas. Escuchan a todos. Después resuelven como creen más conveniente. Comparten la situación. El cuerpo deliberativo con mayoría opositora. Comparten más que las actuales autoridades en “rosagasario” y provincia, ambos vienen de la fragua partidaria. Dialoguistas y con pasado partidario.