Salvador Plasencia, un médico de 43 años de Los Ángeles, se presentó este martes ante la justicia federal y admitió haber distribuido ketamina ilegalmente al actor Matthew Perry. Según los documentos del caso, Plasencia facilitó el acceso del actor a la sustancia incluso fuera de su consultorio, llegando a entregársela en su domicilio o dentro de un vehículo.
Semanas antes de su muerte
El médico de Matthew Perry se declaró culpable por suministrarle ketamina
Salvador Plasencia, uno de los médicos investigados por la muerte del actor Matthew Perry, se declaró culpable de suministrarle ketamina ilegalmente semanas antes de su fallecimiento. Ya son cuatro los imputados que admitieron su responsabilidad en una trama que expone cómo fue explotada la adicción del protagonista de Friends.
Durante la audiencia, el fiscal reveló que Plasencia se refería a Perry como "un idiota" que pagaba por recibir el fármaco, dejando en evidencia el desprecio hacia su paciente y el fin lucrativo de la maniobra. A cambio de su declaración, el médico firmó un acuerdo con la fiscalía que podría reducir su condena, que en principio podría alcanzar hasta 40 años de prisión.
Qué ocurrió con Matthew Perry
Matthew Perry, reconocido mundialmente por su papel de Chandler Bing en Friends, fue encontrado sin vida el 28 de octubre de 2023 en su casa de Los Ángeles. La autopsia reveló que la causa de muerte fue una sobredosis accidental por “efectos agudos de ketamina”, que le provocó pérdida de conciencia y posterior ahogamiento en su jacuzzi.
El actor atravesaba un tratamiento experimental con ketamina para tratar su ansiedad y depresión, aunque los investigadores confirmaron que la dosis presente en su cuerpo al momento de su muerte no se correspondía con ninguna sesión clínica reciente.
La red de responsables
La investigación federal estableció una cadena de suministro ilegal que involucró a médicos, asistentes y distribuidores:
- Kenneth Iwamasa, asistente personal de Perry, se declaró culpable de haberle inyectado varias dosis de ketamina en los días previos a su fallecimiento.
- Mark Chavez, otro médico, admitió haberle entregado ketamina a Plasencia sin justificación médica.
- Erik Fleming, proveedor intermedio, también aceptó su responsabilidad.
- Jasveen Sangha, conocida como “la reina de la ketamina”, es considerada la principal distribuidora. Aún no se declaró culpable y enfrenta cargos por conspiración y distribución.
Todos los implicados, según la fiscalía, actuaron sabiendo que Perry era un adicto en recuperación y aprovecharon esa condición para enriquecerse.
Consecuencias legales
Con la declaración de culpabilidad de Plasencia, ya son cuatro los imputados que admitieron su participación en el suministro de drogas al actor. El médico renunciará a su licencia profesional y se conocerá su sentencia definitiva en diciembre.
La justicia estadounidense busca con estos procesos enviar un mensaje claro sobre el uso indebido de ketamina, una sustancia cada vez más utilizada en contextos médicos pero que, fuera de control clínico, representa un riesgo letal.
Una muerte que expuso una realidad oculta
El caso de Matthew Perry no solo conmocionó a sus fanáticos y al mundo del espectáculo, sino que dejó al descubierto los riesgos que implica el uso terapéutico de drogas como la ketamina sin la debida regulación. La cadena de profesionales que, lejos de asistirlo, se benefició de su adicción, demuestra la urgencia de reforzar los controles sobre estas prácticas.
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