Una investigación por narcomenudeo realizada por agentes de la Policía Federal Argentina, derivó en dos allanamientos simultáneos en el barrio San José de la ciudad de Santa Fe.

La Policía Federal secuestró droga, dinero y celulares en el marco de una investigación iniciada en septiembre. Los domicilios allanados funcionaban como centros de venta y distribución de estupefacientes, según confirmó la policía.

Una investigación por narcomenudeo realizada por agentes de la Policía Federal Argentina, derivó en dos allanamientos simultáneos en el barrio San José de la ciudad de Santa Fe.
El procedimiento, ordenado por el Ministerio Público de la Acusación a cargo del fiscal Arturo Haydar, permitió desarticular dos puntos de venta de estupefacientes y detener a una mujer sindicada como la principal responsable.
Los operativos se realizaron en viviendas ubicadas en San Juan y Risso, y en Dr. Zavalla al 7300, ambas en el corazón del barrio San José. Según confirmaron fuentes policiales, en esos lugares se habían montado verdaderos “kioscos” de droga donde se vendía cocaína al menudeo.

Durante los registros, los efectivos del D.U.O.F. Santa Fe —dependiente de la Superintendencia de Agencias Federales de Investigación— incautaron 86 gramos de clorhidrato de cocaína, una suma de dinero en efectivo y dos teléfonos celulares, elementos de interés para la causa.
La investigación se había iniciado a fines de septiembre, luego de múltiples denuncias vecinales sobre hechos de violencia vinculados al narcomenudeo en la zona.

Con tareas de vigilancia y recolección de pruebas, los agentes lograron identificar a una mujer que operaba los puntos de venta, utilizando los domicilios allanados como búnkeres para la comercialización.
En distintos sectores de la capital provincial, las bandas dedicadas al narcomenudeo se han ido instalando con fuerza, aprovechando la vulnerabilidad social y la falta de presencia policial. Los llamados “kioscos” o “búnkeres” proliferan entre calles de tierra y viviendas humildes, donde la venta de droga se mezcla con la vida cotidiana de familias que apenas logran sobrevivir.
Los vecinos, atrapados entre el miedo y la resignación, muchas veces callan por temor a represalias. En algunos casos, las denuncias anónimas son la única herramienta para romper el silencio.
“Los chicos se pierden, las peleas son por la esquina o por quién vende más”, comentó una fuente barrial. El fenómeno, lejos de ser aislado, refleja el avance silencioso del narcotráfico en los márgenes urbanos de Santa Fe.
Por orden del fiscal interviniente, la mujer —cuya identidad no fue revelada— quedó detenida y trasladada a dependencia policial. En tanto, todo lo secuestrado fue remitido para peritajes y control judicial.

Fuentes de la investigación no descartan nuevas medidas en el marco de la causa, que continúa abierta y bajo la órbita del MPA Santa Fe.
Los investigadores no descartan que los dos puntos desbaratados formen parte de una red de venta al menudeo que se disputaba territorio en barrio San José, donde en los últimos meses se registraron episodios de violencia vinculados a enfrentamientos entre bandas.
El operativo, remarcaron, apunta a desactivar esos focos de conflicto y recuperar tranquilidad en el sector.