En octubre de 2016, dos adolescentes de La Boca —Nuria Couto (18) y Natalia Grenbenshikova (15)— fueron salvajemente apuñaladas cuando salían de la escuela para celebrar un cumpleaños en el Parque Irala.

Mariano Bonetto, sentenciado a prisión perpetua en 2018 por denunciar a dos adolescentes asesinadas en La Boca, fue visto en un estadio de fútbol en Córdoba tras ser declarado inimputable e internado en un centro psiquiátrico. El caso reaviva el debate sobre la Ley de Salud Mental y la seguridad comunitaria.

En octubre de 2016, dos adolescentes de La Boca —Nuria Couto (18) y Natalia Grenbenshikova (15)— fueron salvajemente apuñaladas cuando salían de la escuela para celebrar un cumpleaños en el Parque Irala.
Mariano Bonetto, veterinario, fue prontamente detenido en el lugar y, en 2018, condenado a prisión perpetua tras un juicio que estableció la premeditación del ataque: atacó a una, luego a la otra, y hasta hirió a un testigo que intentó protegerlas
Cuatro años más tarde, en 2022, una evaluación médica concluyó que Bonetto padecía un “síndrome delirante crónico”, lo que derivó en su declaración de inimputable y traslado al Hospital Borda. En diciembre de 2024, bajo el amparo de la Ley de Salud Mental, fue internado en una clínica psiquiátrica de Córdoba, sin aviso previo a las familias de las víctimas
La noticia tomó fuerza cuando vecinos de Laborde, Córdoba, grabaron a Bonetto disfrutando de un partido de fútbol en un estadio local —un encuentro entre el club Recreativo y Olimpo—, sin custodia visible ni notificación a las víctimas
Anna Rodionova, madre de Natalia, manifestó su indignación: "En Navidad lo trasladaron a escondidas… injusticia es poco. Se nos ríen en la cara"
También criticaron que el traslado se realizó sin previo aviso y en contexto festivo, lo que incrementó la sensación de impunidad.
Las familias ya apelaron ante la Corte Suprema, y esperan una revisión urgente del caso.

El juez Ángel Nardiello, quien intervino en la condena de 2018, cuestionó con dureza el procedimiento vigente: “No es lógico en un mundo normal… la Ley de Salud Mental es desastrosa” Según él, la normativa vigente facilita el traslado inadvertido de personas peligrosas, sin establecer protocolos claros para que las víctimas o la comunidad sean notificadas.
El caso pone en evidencia una grieta entre protección de pacientes mentalmente enfermos y la seguridad pública. Mientras Bonetto permanece internado, vecinos de Laborde denuncian miedo y exigencia de medidas concretas para garantizar la seguridad y la prevención de incidentes.

El brutal ataque ocurrió el 11 de octubre de 2016. Bonetto se acercó al grupo de adolescentes, fingió simpatía, y luego asesinó a puñaladas a Nuria (17 puñaladas) y a Natalia (4), según acreditado en el juicio
Una de las jóvenes sobrevivió días en el Hospital Argerich, para fallecer el 5 de noviembre; la otra murió el 24 del mismo mes
La investigación reveló que Bonetto planeó el ataque, seleccionó a las víctimas por su vulnerabilidad, escondió el arma con anticipación y actuó sin mediar palabra. Su intento de suicidio con el mismo cuchillo luego del ataque fue neutralizado por testigos que redujeron su acción.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.