Lunes 30.3.2020
/Última actualización 9:42
El primer ministro de Vietnam, Nguyen Xuan Phuc, alertó este lunes a los residentes de Hanói y ciudad Ho Chi Minh que evalúa imponer una cuarentena para enfrentar la pandemia de coronavirus en este país que registra apenas 194 contagios y ninguna víctima mortal y viene enfrentando el brote con un rastreo riguroso de los contagios y una sociedad confiada en sus líderes.
"Hanói y Ho Chi Minh tienen que revisar sus planes para combatir el virus y deben prepararse para un escenario de cierre y cuarentena completa", dijo Phuc en un breve comunicado.
El sábado, Hanói, la capital del país, cerró el Hospital Bach Mai, uno de los más grandes del país y principal centro de tratamiento de la pandemia, tras detectarse allí uno de los mayores focos de infección.
Por el momento hay 194 casos confirmados y no hay víctimas fatales en el país, aunque tres pacientes se encuentran en estado crítico, informó el diario local Tuoi Tre, que agrega que las escuelas y universidades de Ho Chi Minh permanecerán cerradas hasta el 19 de abril, fecha en que el Gobierno se reunirá para evaluar la situación y tomar una decisión sobre una eventual continuidad.
El virus llegó pronto a Vietnam, el 23 de enero, de la mano de dos ciudadanos chinos y en fechas peligrosas: al inicio del Año Nuevo Lunar, las vacaciones más largas del año en las que millones de vietnamitas aprovechan para viajar dentro y fuera del país, visitado también por miles de turistas chinos.
En esa fecha el país llevaba semanas en guardia y a principios de enero, cuando se hicieron públicas las primeras infecciones por el coronavirus en China, ya realizó evaluaciones de riesgos y creó un comité especial de gestión que hasta ahora le trajo buenos resultados.
Estos índices son valorados positivamente por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Para explicar el éxito de Vietnam se pueden destacar tres puntos: la inversión realizada en tiempos pacíficos, la pronta activación del sistema de respuesta y la manera en que toda la sociedad lo ha encarado con un liderazgo fuerte desde arriba", explica Park Kidong, funcionario de la OMS en Hanói, citado por la agencia de noticias EFE.
En cuanto a la preparación previa "en tiempos pacíficos", Vietnam ya contaba con un plan de actuación en caso de epidemias que le ahorró semanas de trabajo.
El 2 de febrero, con apenas seis casos confirmados, Hanói ya había suspendido vuelos desde las zonas más afectadas de China, anulado visados de entrada, puesto en cuarentena a cientos de personas y cerrado los colegios en casi todo el país.
En las semanas siguientes, las medidas de contención como el aislamiento de toda una región cercana a Hanói (la primera medida de este tipo fuera de China) fueron acompañadas de un rastreo pormenorizado de todas las personas que habían estado en contacto con los infectados para frenar los contagios locales.
Sin embargo, tras más de tres semanas sin nuevas infecciones, el coronavirus regresó con fuerza de la mano de contagios externos, lo que obligó a las autoridades a multiplicar los test e ir endureciendo las restricciones.
En la actualidad son cerca de 37.000 las personas en cuarentena en centros controlados por el Ejército en todo el país, a las que se suman otras 38.000 aisladas en sus casas por imposición o por decisión propia.