Un peligroso prófugo que era intensamente buscado, por se el autor de un crimen vinculado al narcomenudeo en julio pasado, fue detenido por policías que simularon ser indigentes.
Se trata del autor de un crimen vinculado al narcomenudeo, imputado por “homicidio agravado por el uso de arma”.
Un peligroso prófugo que era intensamente buscado, por se el autor de un crimen vinculado al narcomenudeo en julio pasado, fue detenido por policías que simularon ser indigentes.
Durante el operativo fectivos de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local lograron detener a Cristian Ezequiel Rodríguez, de 20 años.
Los uniformados tenían el dato de tres posibles domicilios en los que el sospechoso podía llegar a estar escondido, por tal motivo se apostaron en el lugar haciéndose pasar por personas en situación de calle para lograr su objetivo.
En horas de la tarde del 28 de julio, en el barrio Autódromo, en un punto de venta de drogas Agustín Facundo Sosa, de 21 años, recibió tres de los seis tiros que alguien le efectuó con el fin de asesinarlo.
La víctima fue trasladada al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde falleció y, tanto la Justicia como la Policía, iniciaron una investigación para identificar y detener al o a los autores del crimen. El fiscal Alejandro Pellegrinelli apuntó primero contra dos sospechosos y uno de ellos fue detenido, pero al declarar, aseguró no tener vinculación con el hecho y recuperó su libertad.
La investigación continuó y otros dos jóvenes fueron identificados y acusados, uno de ellos fue Rodríguez, de quien los uniformados conocían cinco posibles domicilios donde poder hallarlo y en estos meses, allanaron cada uno de ellos sin obtener resultados positivos.
Sin embargo, las averiguaciones sobre el paradero del sujeto continuaron y surgieron tres nuevas direcciones, por lo cual la DDI desplegó sus recursos en todas, lo que incluyó el personal vestido de civil y bajo la simulación de ser indigentes.
Al darse cuenta de que había sido descubierto, intentó escaparse, pero no pudo y quedó detenido.
Por orden del fiscal Pellegrinelli, fue conducido a Tribunales, donde se le notificó de la imputación por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma”. Luego, quedó alojado en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
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