El viernes al anochecer, sobre la ruta provincial Nº 10, los faros de una Toyota Hilux sin patente delataron algo más que una simple irregularidad de tránsito. Detrás del volante, un hombre oriundo de la ciudad de Rafaela quedó enredado en una trama que comenzó en Buenos Aires meses atrás.
A las 20:40, frente a la estación de servicio YPF de Santa Clara de Buena Vista, un retén de la Guardia Provincial (UOR·3) le puso alto a la pick-up. El conductor, identificado como J. L. F., no tenía más documentación que su DNI. Ni cédula verde, ni seguro, ni rastros de dominio en el vehículo.
Lo que parecía un control rutinario pronto se transformó en una pesquisa que conectaba a Santa Fe con el conurbano bonaerense.
El vehículo, denunciado como robado en Quilmes, quedó secuestrado a disposición de la Justicia.
El hallazgo detrás del chasis
Los agentes ingresaron el número de chasis al sistema SiFCoP. La respuesta fue inmediata y contundente: la camioneta tenía pedido de secuestro activo desde el 8 de abril de 2025, cuando había sido denunciada como robada en Quilmes, jurisdicción de la Comisaría 1ª.
El silencio de la ruta se cargó entonces con el peso de la evidencia. Lo que parecía un control al azar resultó ser un hallazgo con prontuario.
La imputación
La fiscal en turno ordenó la aprehensión de J. L. F. y la formación de causa por el delito de Encubrimiento. Desde allí, el hombre fue trasladado a la comisaría de jurisdicción, donde quedó alojado mientras avanzan los trámites judiciales.
La Toyota Hilux, en tanto, quedó bajo custodia, a la espera de su restitución a los legítimos dueños en el Gran Buenos Aires.
El caso ilustra la mecánica de los vehículos robados en Buenos Aires que terminan circulando por rutas del interior. Sin patente, sin papeles, pero con un destino marcado: convertirse en parte del engranaje del mercado negro automotor.
El conductor, oriundo de Rafaela, fue trasladado a la comisaría de jurisdicción por encubrimiento.
La detención en Santa Clara expuso, una vez más, que las rutas provinciales no solo conectan pueblos, sino también historias ocultas de un delito que se desplaza de norte a sur.
Controles que acechan
La acción de la Guardia Provincial dejó al descubierto la importancia de los controles vehiculares en ruta. No se trató de un golpe espectacular ni de un operativo cinematográfico, pero sí de un procedimiento donde la minuciosidad resultó clave.
En apenas unos minutos, lo que parecía un simple viaje de rutina terminó con un conductor esposado y una camioneta robada rumbo a los depósitos judiciales.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.