Durante los meses más cálidos, ciertas plantas de bajo mantenimiento pueden ofrecer una barrera natural contra los mosquitos y mejorar tus espacios al aire libre. Aquí, cinco opciones efectivas y decorativas.
Distintos tipos de plantas que pueden ahuyentar a estos insectos
En pleno verano, cuando el calor invita a estar al aire libre, los mosquitos se convierten en visitantes incómodos. En lugar de recurrir exclusivamente a repelentes químicos, existen plantas que, gracias a sus aromas, actúan como barrera natural contra estos insectos.
Estas especies no solo son funcionales, sino que requieren muy pocos cuidados, lo que las convierte en aliadas ideales para jardines o macetas en balcones.
La planta de citronela es un clásico
1. Citronela: el clásico infalible
La citronela es probablemente la planta más conocida para repeler mosquitos. Su aroma cítrico intenso proviene de compuestos como la citronelal, que resulta desagradable para estos insectos.
Según el artículo original, esta planta prospera con exposición al sol y riego moderado (cada 3-4 días si está en maceta), soporta breves períodos de sequía y se propaga fácilmente por esquejes.
Además, basta frotar sus hojas para liberar sus aceites y aumentar su poder repelente.
Lavanda: belleza y eficacia en uno
2. Lavanda: belleza y eficacia en uno
Otra alternativa muy estética es la lavanda. Sus flores violetas no solo embellecen cualquier rincón, sino que contienen linalool, un compuesto natural que los mosquitos encuentran desagradable.
Esta planta prefiere suelos bien drenados y exposición solar, y es bastante tolerante una vez establecida, lo que la convierte en una opción práctica y muy decorativa.
Hierbas aromáticas de bajo mantenimiento
Además de las dos anteriores, otras tres plantas combinan propiedades repelentes con un cultivo sencillo.
3. Albahaca
Hierba aromática muy usada en la cocina, pero también útil contra los mosquitos. Variedades como la albahaca limón o canela liberan aceites volátiles (como el limoneno) que disuaden a los insectos.
Se adapta bien a macetas o huertas, siempre que reciba buena luz y riego moderado.
4. Romero
Esta planta mediterránea tolera bien el calor y la sequía, algo destacado en reportes sobre plantas repelentes.
Su fragancia amaderada y persistente amplifica su efecto cuando se aplastan algunas ramas; además, es muy resistente y no requiere cuidados elaborados.
5. Melisa (o toronjil)
Conocida por su aroma cítrico, la melisa (Melissa officinalis) es otra opción efectiva.
Es una planta perenne, crece con facilidad, y su olor proviene de terpenos como citral y citronelol. Prefiere suelos bien drenados y un poco de sombra; no es especialmente exigente, por lo que resulta ideal para quienes buscan una solución natural sin mucho trabajo.
Colocalas cerca de zonas de descanso, puertas o ventanas donde suele haber mosquitos.
Si están en macetas, asegurate de que tengan buen drenaje para evitar el encharcamiento.
Para potenciar el efecto repelente, se pueden machacar algunas hojas para liberar más aromas.
Complementá con otras prácticas, como eliminar agua estancada, ya que las plantas repelen pero no evitan por sí solas la reproducción de todos los mosquitos.