¿Por qué tu cuerpo podría estar pidiendo vitamina D? Ocho señales que no debés ignorar
La deficiencia de vitamina D es más común de lo que se cree y puede afectar desde los huesos hasta el estado de ánimo. Ocho síntomas clave pueden alertarte a tiempo y ayudarte a prevenir complicaciones.
¿Por qué tu cuerpo podría estar pidiendo vitamina D?
La vitamina D es muy esencial para la salud de los huesos, el sistema inmunológico, los músculos y la energía. Sin embargo, su déficit suele pasar desapercibido porque sus síntomas son leves y variados. Conocer estas señales puede prevenir complicaciones graves si se actúa a tiempo.
Síntomas
Fatiga persistente
El cansancio constante, incluso después de descansar lo suficiente, puede ser una señal de falta de vitamina D, relacionada con alteraciones del sueño, inflamación y desequilibrios en neurotransmisores.
Dolor muscular y articular
La carencia favorece procesos inflamatorios que generan molestias musculares y dolor en las articulaciones. Incluso puede agravar enfermedades como la artritis.
La carencia favorece procesos inflamatorios que generan molestias musculares y dolor en las articulaciones.
Infecciones frecuentes
La vitamina D desempeña un papel clave en la defensa del organismo. Su déficit puede debilitar el sistema inmune y aumentar la frecuencia de enfermedades respiratorias.
Alteraciones del estado de ánimo
La falta de exposición al sol y de vitamina D influye en neurotransmisores que regulan el ánimo, pudiendo generar depresión o trastorno afectivo estacional.
En la infancia, la deficiencia puede causar raquitismo, provocando deformidades óseas, fragilidad, dientes quebradizos y dolor muscular.
Riesgo óseo en adultos
Niveles insuficientes de vitamina D aumentan el riesgo de osteopenia u osteoporosis, incrementando las posibilidades de fracturas, sobre todo en personas mayores.
Riesgo de esclerosis múltiple
Algunas investigaciones sugieren que la falta de vitamina D podría estar vinculada con un mayor riesgo de desarrollar esclerosis múltiple.
Afecciones cardiovasculares
La deficiencia puede influir en la inflamación, la salud vascular y la función del músculo cardíaco, aumentando el riesgo de problemas cardíacos.
Aumenta el riesgo de problemas cardíacos.
Diagnóstico y prevención
Los especialistas recomiendan realizar análisis de sangre en personas con síntomas o factores de riesgo. Para prevenir y revertir la deficiencia, aconsejan:
Exponerse al sol de forma moderada.
Incluir alimentos ricos o fortificados en vitamina D, como pescados grasos, lácteos y huevos.
Considerar suplementos bajo supervisión médica.
Además de la dieta y la exposición solar, ciertos factores pueden aumentar el riesgo de deficiencia, como vivir en zonas con poca luz natural, tener piel más oscura, usar siempre protector solar, padecer enfermedades renales o intestinales que dificulten la absorción, o ser mayor de 60 años. Identificar estos condicionantes es clave para un diagnóstico precoz y un tratamiento eficaz.
La falta de vitamina D es más común de lo que parece y sus señales pueden pasar inadvertidas. Detectarlas a tiempo y tomar medidas preventivas es fundamental para proteger la salud ósea, muscular, inmunológica y emocional.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.