Aunque es común asociar la hipoglucemia con la diabetes, existen múltiples factores que pueden provocar una caída de glucosa en sangre en personas sin esa condición.

La hipoglucemia, o bajo nivel de azúcar en sangre, no es exclusiva de quienes padecen diabetes: en personas sin esta enfermedad, puede ser provocada por alcohol en ayuna, cirugías digestivas o tumores como el insulinoma. Conocer sus causas ayuda a reconocer los síntomas y evitar complicaciones.

Aunque es común asociar la hipoglucemia con la diabetes, existen múltiples factores que pueden provocar una caída de glucosa en sangre en personas sin esa condición.
Entre ellos, el consumo de alcohol con el estómago vacío. Al interferir con la producción de glucosa en el hígado, reduce los niveles de azúcar y puede desencadenar síntomas como sudoración, temblores y confusión
Otro factor a considerar son las intervenciones quirúrgicas en el tracto gastrointestinal, como las cirugías bariátricas o de resección intestinal. Estas pueden alterar la absorción y metabolismo de glucosa, elevando el riesgo de episodios hipoglucémicos, especialmente tras las comidas.
Además, ciertos tumores como el insulinoma —que produce insulina de manera excesiva— pueden provocar hipoglucemia recurrente al estimular una liberación descontrolada de insulina, incluso sin el consumo de alimentos.
Este tipo de tumor, aunque poco frecuente, es una causa importante a descartar cuando los episodios hipoglucémicos ocurren sin causa aparente

Detectar una hipoglucemia a tiempo es clave para evitar complicaciones. Los síntomas comunes incluyen sudoración, temblores, mareos y confusión, sensaciones que requieren atención inmediata para estabilizar los niveles de glucosa
Si estos cuadros se repiten sin una causa evidente, es fundamental consultar con un profesional de salud. El médico puede ordenar análisis de glucosa en ayunas, pruebas de tolerancia a la glucosa, medición de insulina o estudios de imagen para descartar un insulinoma u otras alteraciones metabólicas o estructurales.

En caso de confirmarse alguna de las causas mencionadas, el tratamiento variará según sea una simple precaución (como evitar el alcohol en ayunas), una complicación postquirúrgica o un tumor. Por ejemplo:
Modificaciones en el estilo de vida (evitar alcohol en ayunas, pautas dietéticas que prevengan caídas bruscas de glucosa).
Monitoreo médico regular tras una cirugía digestiva.
Tratamiento específico, que en casos de insulinoma puede incluir cirugía, medicación para controlar la secreción de insulina o seguimiento endocrinológico riguroso.

Además del control médico, la alimentación juega un papel clave en la prevención de los episodios de hipoglucemia en personas sin diabetes. Los especialistas sugieren:
Comer en intervalos regulares: evitar ayunos prolongados y realizar entre 4 y 6 comidas pequeñas a lo largo del día.
Elegir carbohidratos de absorción lenta: priorizar alimentos como pan y arroz integral, avena, legumbres y vegetales, que mantienen estables los niveles de glucosa en sangre.
Combinar hidratos con proteínas y grasas saludables: incorporar frutos secos, semillas, huevo, yogur, quesos bajos en grasa o carnes magras en las comidas principales y colaciones.
Evitar excesos de azúcares simples: productos como gaseosas, golosinas y harinas refinadas pueden generar un aumento rápido de glucosa seguido de una caída brusca.
Limitar el alcohol, sobre todo en ayunas: beber con el estómago vacío es uno de los factores de riesgo más frecuentes de hipoglucemia en personas sanas.
Hidratación adecuada: beber suficiente agua durante el día, ya que la deshidratación también puede agravar síntomas como mareos y cansancio.
Estas recomendaciones son especialmente útiles para quienes han atravesado cirugías digestivas o presentan antecedentes de hipoglucemia funcional. En todos los casos, la consulta con un médico o nutricionista es fundamental para adaptar la dieta a las necesidades individuales.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.