La ciudad de Santa Fe determinó las zonas de seguridad hídrica: la clave, los nuevos reservorios
En una capital rodeada de ríos, era una deuda pendiente definir las áreas de seguridad ante riesgos hídricos dentro del ejido urbano y dos barrios costeros. Ahora, se saldó. Santa Fe, camino a estar más protegida ante eventuales crecidas extraordinarias.
Uno de los reservorios del Noroeste, desde el drone de El Litoral. Crédito: Fernando Nicola
Era una propuesta -necesaria- del año 2019, pero llegó la pandemia y quedó frenada. En diciembre de 2025, se logró darle aprobación. Es que el Concejo de Santa Fe, a solicitud del Ejecutivo Municipal (Mensaje N° 44) aprobó una modificación del Plano de Distritos de Zonificación de la Ordenanza N° 11.748, y fijó las zonas de Seguridad Hídrica (ZSH) y de Reservorio Hídrico (DRH).
La aludida normativa es el Reglamento de Ordenamiento Urbano (ROU, 2010), y lo que hizo el Legislativo local es determinar taxativamente aquellas zonas donde pueden darse riesgos hídricos ante crecidas extraordinarias de los ríos Paraná o Salado, e incluso frente a precipitaciones abundantes que escapan a lo previsto.
Estas Zonas de Seguridad Hídrica y de Reservorios Hídricos en la ciudad capital incluyen el Oeste del casco urbano- reservorios de las Estaciones 2 a 5-; el reservorio de la cuenca GUADA al Noreste de Santa Fe y los barrios costeros Colastiné Norte y La Guardia. Estas serán las áreas hídricas a custodiar.
Los argumentos
Según los argumentos del municipio, "si bien los distintos sectores del ejido urbano tienen diferentes consideraciones de ocupación de los excedentes pluviales y acumulaciones por altura de niveles freáticos en momentos de crecida de ríos, existe documentación suficiente para identificar los sectores más vulnerables y que no son seguros para su utilización como lugares residenciales".
Se priorizaron los sectores "que por sus condiciones y cercanía a los sistemas de desagües pluviales se pueden constituir en almacenamientos temporarios y que de hecho ofician de Reservorios, sin perjuicio de que en espacios públicos se implementen retardadores pluviales bajo la misma lógica", agrega.
La ciudad definió su nuevo "mapa hídrico". Crédito: Archivo
El mensaje del Ejecutivo recuerda que se tomaron como base los estudios de drenaje urbano desarrollados por el Instituto Nacional del Agua (INA), complementados con el trabajo de las áreas de riesgo hídrico.
También, "aquellos puntos que por su dinámica constituyen reservorios naturales, ya sea por su topografía e implantación en áreas de acumulación; como así también de aquellos que, por acciones antrópicas por extracción de suelos para otros fines, hoy son depresiones ávidas de acumulación los excedentes pluviales".
En cuanto a la demarcación de los Distritos de Reservorio Hídrico, éstos están asociados al sistema de drenaje, puntos de operación del sistema de descarga, a canales, canales de guarda, compuertas y/o estaciones de bombeo.
Como se sabe, los canales y las estaciones de bombeo "se constituyen en los elementos principales de defensa contra eventos pluviométricos de consideración (...), dependiendo de su funcionamiento y estado", se resalta en los fundamentos de la iniciativa.
El antecedente
Con la sanción de esta ordenanza, "estamos saldando una vieja deuda del municipio", declaró el ahora ex concejal -por mandato cumplido- Carlos Pereira (Interbloque oficialista "Unidos"). Y dio un contexto histórico: "Es curioso, porque le estamos dando aprobación (en diciembre de 2025) a un mensaje del año 2019".
Ocurrió que esta iniciativa tuvo sus idas y vueltas. El mensaje de 2019 contemplaba modificaciones del ROU (en lo que versa sobre la zonificación de riesgo hídrico) solamente en las zonas de Colastiné Norte y La Guardia, y dejaba a los sectores Oeste y Noroeste del casco urbano "para su posterior análisis".
Llegó la pandemia, y ante la emergencia sanitaria por el Covid-19, hubo demoras para realizar los relevamientos topográficos que permitieran la presentación de un plano definitivo que ayudará a la toma de decisiones certeras sobre este asuntos tan importante para una ciudad que es como un "plato hondo" rodeada de ríos.
El intendente Poletti supervisa el trabajo de un sistema de drenaje pluvial. Crédito: Archivo
Estos estudios pudieron concretarse recién en 2023. "Ni bien llegada la actual gestión del intendente (Juan Pablo Poletti), fue reenviado nuevamente este expediente al Ejecutivo, y vino una respuesta. Estuvimos conversándola con las áreas técnicas del municipio y, finalmente, éste es el resultado. Estamos muy satisfechos", agregó el ex edil radical.
El mapa hídrico
La norma en cuestión representa el "nuevo mapa hídrico" que marca la ubicación definitiva de todos los reservorios. "Algunos de ellos son conocidos, como todos del sector Oeste. Pero además , ahora el lago del Parque Sur 'Gral. Manuel Belgrano' pasa a considerarse un reservorio", adujo Pereira.
"Además, estamos estableciendo como reservorios algunas cavas del Norte de la ciudad que hay que preservar -prosiguió-. A lo mejor a futuro se construyan nuevos desagües, pero hoy esas cavas son esenciales para la preservación de la seguridad hídrica. También queda definido el reservorio de Colastiné Norte".
Pereira explicó que hubo un cambio de criterio en el Noreste: "Aquí hay un reservorio frente al ex Gada, en la zona aledaña a Playa Norte. Más allá de esto, hay una definición técnica de cómo terminar de redefinir la situación hídrica en el Noreste, que va que va a exigir un trabajo técnico" por parte del municipio.
"La ciudad termina de consolidar un paso que ya había empezado a dar hace 9 años. Esto contribuye a la seguridad hídrica y a seguir construyendo algo que todos queremos: una Santa Fe mejor preparada en materia de riesgo hídrico", cerró.