Domingo 9.6.2019
/Última actualización 8:44
Es conocido como ingeniero y gobernador, pero no olvida sus tiempos de “zaguero áspero” en el fútbol (según su propia definición), de remero en el Rowing de Rosario -“sigo remando” dice- o de militante en el Movimiento Nacional Reformista, fundado Guillermo Estévez Boero. Eran tiempos duros; 1973 en la Universidad Nacional de Rosario.
Miguel Lifschtz recibió a El Litoral en su despacho de la Casa Gris para contar cómo evalúa su propia gestión y el desafío de un comicio en el que el Frente Progresista Cívico y Social pone en juego su gestión. Su síntesis tiene un punto emotivo: pocas horas antes saludó a Hermes Binner cuando recorría el nuevo Iturraspe; los hospitales son uno de los puntos altos que exhibe la política de Estado santafesina.
- ¿Porqué la población debe votar otra vez al Frente Progresista?
- Hemos cumplido con todo aquello prometido, con aquellos primeros proyectos que Hermes Binner trajo como innovación a la provincia, un gran sistema de salud pública, moderno, del siglo XXI, con grandes hospitales de última generación, sistema en red, centros de atención primaria con tres niveles de complejidad que parecía sueño hace 12 años pero que hoy, después de tres gobiernos y de mucha inversión, y de sostener una política de Estado es una realidad. Dijimos que la educación iba a ser una prioridad y lo es: más de 200 nuevas escuelas secundarias, más de 700 nuevas salas de educación inicial, un 65% más de jóvenes haciendo carreras terciarias, hemos duplicado la oferta de tecnicaturas, estamos construyendo 20 edificios nuevos para institutos del profesorado que históricamente fueron el orejón del tarro y nunca tuvieron edificio propio.
- La obra pública ocupó un lugar central en su gestión, tal vez gracias al fallo por la coparticipación.
- Se iniciaron en gestiones anteriores, con dificultades económicas que atravesaban la provincia, que tuvieron un desarrollo mucho más imponente durante mi gestión -obviamente a partir de haber peleado el 15% de coparticipación- lo que nos permitió tener un plan de inversión pública inédito para la provincia. También hemos cumplido con todas las cosas que habíamos prometido, lo hemos hecho con transparencia. Llevamos 12 años, en mi período he hecho 1.300 licitaciones y no he tenido ninguna observación, sospecha ni de sobreprecio, corrupción ni adjudicación de empresas amigas, ni nada que se le parezca, ni conflicto de intereses.
- A pesar de estos argumentos que aparentan contundencia, la elección viene peleada.
- Somos una fuerza política que en los últimos 20/25 años, nunca ha estado alineada directamente con los proyectos nacionales. Siempre hemos mantenido independencia respecto de los proyectos políticos nacionales y eso nos ha obligado a competir no sólo con candidatos locales sino con fuerzas nacionales que tienen otra cobertura, otra presencia mediática.
- Su misma afirmación demuestra que el electorado se comporta prescindiendo de los alineamientos nacionales.
- Es correcto. Pero eso nos ha costado un gran esfuerzo, nos ha obligado a competir por fuera de los alineamientos nacionales, y eso dificulta el proceso. Cuando en la provincia la división era entre dos estábamos más holgados, la aparición de Cambiemos divide el escenario y nos obliga a un mayor esfuerzo. Aún así la gente termina valorando la gestión, la coherencia política y esta vez va a ocurrir lo mismo.
- Hasta ahora en las provincias han ganado los oficialismos más allá de los intentos del gobierno nacional y de otros sectores de meterse en la vida provincial.
- Así es y creo que en Santa Fe va a ocurrir lo mismo.
“En Santa Fe no hay grieta: hay diferencias políticas, discusiones, pero hay diálogo, acuerdos en Legislatura; un trabajo conjunto con intendentes y presidentes de comuna de distintos partidos. Esto es un valor de calidad institucional”.
“Nuestros oponentes tienen poco para mostrar de lo que han hecho en todos sus años a favor de la provincia. Omar Perotti fue funcionario de varios gobiernos justicialistas, responsable de la privatización del Banco de Santa Fe, funcionario de gobiernos cuando la provincia no priorizaba ni la salud ni la educación, cuando no se hacía obra pública y las escuelas se arreglaban como podían a partir del esfuerzo de las cooperadoras, cuando no había concursos, no había 82% móvil”.
Lifschitz no necesitó preguntas para atender a quienes compiten por la Casa Gris. “Me podrán decir que eso es el pasado, que cambió de ideas, pero lleva años como legislador nacional y no hemos visto un solo proyecto a favor de la provincia, no lo hemos visto presente involucrado en los distintos problemas y temas que ha atravesado la provincia en estos últimos años. Ha mostrado poco interés por la violencia, la inseguridad y el narcotráfico que dice que es su principal objetivo pero no hay ningún proyecto de su gestión como legislador nacional que tenga que ver con estos temas”.
“Creo que vamos a ganar bien; es una elección disputada en lo local donde se da la particularidad que además del peronismo y de Cambiemos, que son rivales de Pablo Javkin, también hay una fuerza local como Ciudad Futura que tiene un electorado que no crece, que lo sostiene y que es el 10% que hace que la elección sea más abierta, más dispersa. Aún en ese escenario complejo, hoy Pablo está unos puntos adelante y va a estirar esa diferencia al 16 de junio.
“El fenómeno del radicalismo nacional adhiriendo a Cambiemos y el provincial mayoritariamente quedándose en el FPCyS produjo una fragmentación dentro de la UCR que le restó chances de construir una figura alternativa con peso en Santa Fe. Quizás si José Corral se hubiera quedado en el Frente Progresista hubiera podido tener mejores chances. Cada uno elige el camino que quiere seguir”.
Consultado por qué no surge un postulante radical dentro del FPCyS, Lifschitz dijo que “el radicalismo en algún momento va a tener un candidato con chances como el caso de Pablo Javkin en Rosario, que tuvo sus orígenes en el radicalismo, que es un ejemplo de coherencia y se mantuvo en las buenas y en las malas en el espacio del Frente. Peleó y hoy tiene la oportunidad de ser intendente de Rosario. El radicalismo de hecho tiene una representación muy fuerte en el interior. Un candidato joven ganó Venado Tuerto, hay figuras jóvenes que tendrán mucho desarrollo en los próximos casos, como (Maximiliano) Pullaro o (Lisandro) Enrico”.
“Casi no hay delitos importantes que no sean rápidamente esclarecidos”
- Se ataca mucho a su gobierno con el tema seguridad.
- Si solo nos atacan con eso estuvimos bien en todo lo demás. Es un tema siempre difícil. Yo puedo decir con toda certeza que la foto de la policía, de la justicia, del sistema carcelario que yo tenía cuando inicié mi gestión y la actual es muy distinta. La que dejo es muy distinta y muy superior en todo sentido. La policía está mucho mejor equipada con móviles de última generación, con uniformes, con armamento, con tecnología. En los pueblitos más apartados del Norte están las chatas nuevas , los uniformes impecables, los chalecos antibalas, el armamento.
- Están los equipamientos, ¿y las capacidades?
- Tenemos más efectivos, una fuerza más entrenada, hemos puesto por primera vez la obligación de que los policías salgan con los dos años completos de formación y el tercer año lo realizan con el primero de práctica profesional. Hemos instalado la formación permanente, la escuela de Especialidades, la de Investigaciones. Hemos mejorado notablemente la formación inicial. Hemos desarrollado y perfeccionado la criminalística, tanto en Recreo como en Rosario tenemos centros con todo el equipamiento y profesionales. Hemos creado el organismo de investigaciones que está empezando a dar frutos.
- Buenos Aires y Capital hablan del problema de la “puerta giratoria”
- Hemos fortalecido la justicia penal y tenemos un nivel de esclarecimiento de casos altísimo. No hay casi delitos importantes que no sean esclarecidos rápidamente. Todas las organizaciones delictivas de alguna monta que operaban en Santa Fe han sido desarticuladas y sus responsables detenidos, procesados y condenados. El último caso, Lindor Alvarado está entrando en imputativa. En el sistema carcelario hemos incrementado casi 1500 plazas y no tenemos prácticamente detenidos en comisarías. Hemos desarrollado un trabajo con jóvenes en situación de vulnerabilidad social y de conflicto con la ley. Tenemos más de 12500 jóvenes en el programa Nueva Oportunidad. Hemos desarrollado la metodología de abordaje multiagencial en barrios más violentos, con proceso de pacificación. Lo hemos iniciado en Rosario y Santa Fe con resultados extraordinarios; eran barrios calientes y después de las intervenciones en conjunto entre policía, fiscales y áreas sociales, hemos logrado bajar caso a cero la violencia. Por supuesto que falta, pero hemos desarrollado un camino que está mostrando resultados positivos.
- De todas maneras el tema es el que más se usa para atacar al gobierno en la campaña.
- De todos los opositores no veo una sola propuesta de lo que van a hacer. Lo que dice Perotti que va a ser jefe de la policía es una obviedad, lo dice la Constitución. Yo también lo soy y me hago cargo de eso; todas las semanas me reúno con el ministro de Seguridad y su equipo para repasar temas y objetivamente la policía tiene control político. Hay casos de corrupción y de violencia institucional como los hay en todas las policías, pero somos implacables. Hemos ido saneando la policía con más de 500 exoneraciones. Hemos avanzado mucho.
“Todos los delitos han bajado en estos cuatro años, aún los más duros como el homicidio, que tuvo su pico el año pasado con el juicio a los Monos en Rosario; este año hay otra baja importante”.
Al recordársele la vieja acusación al “narcosocialismo”, Lifchitz fue contundente: Esto se utiliza incluso como campaña sucia. Decimos con absoluta certeza que no hay un dirigente o militante del Partido Socialista acusado, sospechado, ionvolucrado, procesado o condenado por el tema narcotráfico. Como sí lo hay de otros partidos; dirigentes del peronismo de distintos lugares y de Santa Fe también están involucrados con el tema del narcotráfico, de Cambiemos también ha unos cuantos como el intendente de Paraná, acá nomás. Así que en eso estamos tranquilos”.
“Dejo una provincia 10 puntos para el que venga. Ordenada económicamente, con muchos proyectos realizados, pliegos de licitación, obras en marchas y listas para licitar. Hemos avanzado muchísimo en materia hídrica en la provincia. Hemos firmado acuerdos interjurisdiccionales con Córdoba en tres cuentas y con Chaco y Sanitago en los Bajos Submeridionales. Hemos hecho planificación de macrocuencas. El Plan del Norte y los dos de la Costa están en marcha con un sistema educativo y un sistema de salud de primera”.
Si la economía del país se ordena para el año que viene, Santa Fe despega primero”, sostuvo Lifschitz. Pero reconoció ante la consulta que la macro es un desafío. “No le creo al FMI, nunca acertó en sus recetas”.
Lavagna, para saltar la grieta
¿Lavagna se diluye?, fue la pregunta. Fue una iniciativa primero de él que sugirió la posibilidad de participar en el proceso electoral nuestro, que fuimos de los primeros en entusiasmarnos. Se sumó nuestro espacio progresista que es pequeño pero no deja de tener cierto peso. Con Margarita y algún sector del radicalismo. Y después se entablaron diálogos con otro polo fuera de la grieta que es Alternativa Federal.
“Fue complejo ese diálogo -reconoció el mandatario santafesino- porque en ese peronismo no hay demasiada unidad de criterio entre los que tienen posiciones ambiguas y se acercan demasiado a Unidad Ciudadana, como Massa, y los que también tienen posiciones ambiguas y se acercan al gobierno. Los gobernadores que se suponen seguirían a Schiaretti no lo hicieron y apareció el enroque de Cristina. Si bien no está cerrado el diálogo, es complejo”.
Sin embargo quedó en claro que para el líder socialista “lo de Lavagna está firme, lo vamos a acompañar. Y si se ordena el escenario y Alternativa Federal se termina diluyendo, Consenso puede ser una propuesta competitiva.”
Respecto de “la grieta” en segunda vuelta, o aún en la primera, el mandatario santafesino insistió: quisiera que no llegáramos a esa opción, creo que no sería buena para los argentinos: votar en contra del otro y no a favor. Sería muy importante que pudiéramos construir una alternativa”.
“El radicalismo era un factor muy importante para construir ese centro de izquierda democrática, era el partido que debió liderar, ser la base de sustentación. Su corrimiento hacia el PRO lo sacó de ese lugar; ojalá que vuelva a posicionarse como ocurre en Santa Fe, en el camino que necesita la Argentina para cerrar la grieta”.