Un derrame de ácido causó temor en Acindar

El incidente se registró el jueves por la noche en un tanque horizontal que contenía ácido clorhídrico, ubicado sobre una calle externa, cuando comenzó a perder una brida que se utiliza para la limpieza del depósito. El líquido se derramó sobre una pileta de contención y luego se filtró hacia el interior de la planta de alambres, que debió ser evacuada.

El gerente de Asuntos Externos de Acindar, Carlos Vaccaro, confirmó que el ácido circuló además por un canal auxiliar de desagüe que desemboca en el Río Paraná, tras 1.500 metros de recorrido, pero aseguró que las muestras obtenidas en el curso de agua no revelaron anomalías.

“Se hizo un control del PH del agua en el río y los resultados fueron normales”, indicó el ejecutivo, quien no pudo precisar la cantidad de líquido derramado aunque aclaró que "la capacidad máxima del tanque es de 40 mil litros" y rechazó así las versiones que apuntaban una pérdida de 60 mil litros de ácido.

Según explicó Vaccaro, “en la última inspección mensual que la empresa realizó sobre la pileta de contención no se detectó ninguna irregularidad pero ahora comprobamos que hubo una fisura en la base”.

Limpieza

La empresa solicitó la asistencia del Cuartel de Bomberos Voluntarios de Villa Constitución y, rápidamente, dos grupos de trabajo realizaron tareas de limpieza en el lugar –donde se evacuaron entre 15 y 18 personas–, colocando aserrín, arcilla y otros elementos absorbentes.

Ecologistas

Tras tomar conocimiento sobre el hecho, el Centro Ecologista Renacer manifestó su preocupación y reclamó una aclaración de la empresa.

“Nos dijeron que hubo peces muertos pero nosotros hicimos un reconocimiento por la costa del río y no encontramos nada. Sin embargo, aunque no hay evidencia física, la empresa debe explicar lo ocurrido y presentar un informe a las autoridades, especialmente para que esto no se repita en el futuro ya que tenemos entendido que ya habría ocurrido un incidente similar el año pasado”, comentó Miguel Ángel Alfaro, secretario del Centro Ecologista Renacer.

“Lo grave es que estas empresas deben tener un plan de contingencia. No se pueden tirar este tipo de sustancias al Río Paraná”, agregó.