El cerebro en "modo ahorro": la pereza cognitiva, una amenaza silenciosa de la era digital

Actualmente la sociedad está inmersa en mundo cada vez más conectado, donde la tecnología se ha convertido en una extensión de cada ser humano. Sin embargo, un detalle que suele pasarse por alto es que su uso desmedido y la constante exposición a pantallas están provocando un preocupante fenómeno: la atrofia cerebral.

Así lo advierte el Dr. Hugo Valderrama, médico neurólogo y máster en neurociencias, quien subraya la importancia de generar conciencia sobre el cuidado de nuestra salud cerebral, especialmente en el marco del Día Mundial del Cerebro.

El cerebro, el centro de mando vital

El Dr. Valderrama enfatiza que "nosotros somos cerebro, el resto es un medio de transporte y reproducción. Nuestros sentimientos, razonamientos, memorias y la interpretación del mundo que nos rodea nacen en nuestras redes neuronales".

Por ello, mantener hábitos saludables es fundamental no solo para prevenir enfermedades, sino para potenciar nuestras capacidades mentales y disfrutar plenamente de la vida. El neurólogo destaca "la importancia del ejercicio físico aeróbico -20 minutos al día-, un sueño adecuado, una alimentación balanceada, un entorno social sano y la estimulación constante con desafíos mentales".

La pereza cognitiva en la era de la pantalla

La proliferación de chatbots e inteligencia artificial ha transformado la manera en que abordamos tareas diarias, permitiendo que estas herramientas realicen por nosotros trabajos que antes exigían un esfuerzo cognitivo considerable. Si bien esto puede parecer una ventaja, el Dr. Valderrama advierte sobre la "pereza cognitiva" que se instala cuando delegamos en exceso nuestras funciones mentales.

"Si dejamos de caminar por usar el auto, nuestro cuerpo se atrofia; de la misma manera, si las pantallas nos impiden observar nuestro entorno, comunicarnos verbalmente, desarrollar el razonamiento crítico y la empatía, nuestro cerebro se atrofia o, peor aún, no se desarrolla correctamente", ejemplifica el especialista.

Paralelamente, el auge de aplicaciones adictivas como TikTok o Instagram nos somete a un flujo constante de información y estímulos, manteniendo nuestro cerebro en un estado de alerta y sobreexcitación casi permanente. Este bombardeo digital no solo fragmenta nuestra atención, sino que también puede alterar nuestros ciclos de descanso y afectar la capacidad de nuestro cerebro.

"Ninguna habitación de 20 centímetros como un celular puede emular el estímulo que genera el mundo y las personas que nos rodean", afirma Valderrama. La tecnología debe ser una herramienta que nos potencie, no que nos inutilice.

El mito del multitasking cerebral

Contrario a la creencia popular, el Dr. Valderrama desmiente la existencia del multitasking en el cerebro. "Nuestra atención no se divide, sino que rota rápidamente de una actividad a otra, dando la falsa sensación de que realizamos varias tareas simultáneamente", explica el especialista.

A su vez, el médico neurólogo ejemplifica que "si bien ciertas actividades automatizadas (como leer y comprender, o conducir y prestar atención al entorno) pueden ejecutarse en paralelo, cualquier intento de hacer muchas cosas a la vez consume recursos cerebrales, aumentando el margen de error y el agotamiento mental".

Estrés crónico, el ataque silencioso al sistema nervioso

El estrés crónico y la sobreexigencia representan una amenaza constante para nuestro sistema nervioso. Cuando el cerebro interpreta amenazas de forma continua, nos prepara para "atacar o huir", tanto mental como físicamente. Mentalmente, esto puede magnificar los problemas, reducir las alternativas de solución y dificultar el descanso.

Físicamente, el cuerpo reacciona como si enfrentara un peligro real, contrayendo músculos y redistribuyendo el metabolismo, lo que puede derivar en dolores de cabeza tensionales, gastritis, colon irritable y otros síntomas. La práctica diaria de ejercicio físico aeróbico se presenta como una medida fundamental para liberar esta tensión acumulada.

Hábitos para un cerebro resiliente en la hiperconectividad

Para proteger y fortalecer la salud cerebral en la era digital, el Dr. Valderrama recomienda un enfoque honesto y pragmático:

• Sincerarse sobre el uso tecnológico: realizar una lista objetiva de para qué realmente necesitamos la tecnología de forma útil y efectiva.

• Desechar lo que no aporta: eliminar el uso de tecnología que no tenga un objetivo claro, genere dependencia o consuma nuestro tiempo sin beneficio. Esto incluye ciertas redes sociales, el exceso de videojuegos o el consumo desmedido de series y películas.

• Reconectar con el entorno: utilizar el tiempo liberado para disfrutar del mundo que nos rodea, explorar, despertar nuevos objetivos y pasiones, y cultivar un entorno social saludable.