Si alguna vez viste unatorta alemana y pensaste que era complicada de preparar, llegó el momento de animarte. Este clásico de la repostería no solo es delicioso, sino que también puede hacerse en casa siguiendo pasos claros y sencillos. Con ingredientes fáciles de conseguir y un poco de paciencia, cualquier amante de los postres puede disfrutar de su sabor casero.
Ingredientes que no fallan
La receta base requiere elementos simples: 500 gramos de harina, 100 gramos de manteca, 40 gramos de levadura y 200 centímetros de leche. A esto se le suma la ralladura de limón, 100 gramos de azúcar y 2 huevos. Para la cubierta, se utiliza una mezcla dulce de 200 gramos de crema de leche y 150 gramos de azúcar.
La combinación de estos ingredientes, aunque pueda parecer tradicional, da como resultado una torta húmeda y aromática, ideal para acompañar un café o un té. La clave está en seguir correctamente los pasos de preparación y prestar atención a los tiempos de levado y cocción.
La receta base requiere elementos simples
Paso a paso
Para empezar, se hace una corona con la harina y el azúcar. Luego, la leche se entibia y se le agrega la levadura junto con dos cucharadas de harina y una de azúcar, dejando espumar la mezcla.
Por otro lado, se bate la manteca con los huevos y la ralladura de limón hasta lograr una mezcla homogénea. En el centro de la corona de harina, se coloca la preparación de la leche y la manteca con los huevos. Se amasa durante cinco a diez minutos sin agregar más harina y se deja leudar hasta que la masa duplique su tamaño.
Una vez que la masa ha levado, se desgasifica y se coloca en un molde previamente enmantecado, dejando reposar otros 20 minutos. Con los dedos, se hacen huecos sobre la superficie de la masa para luego cubrirla con la mezcla de crema de leche y azúcar. Finalmente, la torta se hornea durante 30 minutos hasta que adquiera un color dorado y una textura esponjosa.
Cualquier amante de los postres puede disfrutar de su sabor casero.
Consejos para un resultado perfecto
Aunque la receta pueda parecer extensa, la preparación no es complicada si se respetan los tiempos de levado y se manipula la masa con cuidado. Es fundamental no agregar harina de más durante el amasado y asegurarse de que la leche no esté demasiado caliente al incorporarla a la levadura, ya que esto podría afectar el levado.
El resultado final es una torta alemana suave, con un toque dulce y cremoso, que combina perfectamente con desayunos, meriendas o reuniones familiares.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.