Luego de que la agenda mediática y diplomática de Estados Unidos fue copada por los incidentes registrados en Medio Oriente tras las discusiones nucleares y la escalada entre Irán e Israel, Donald Trump regresó de lleno al plano de los aranceles.

Donald Trump regresa a la escena de los impuestos tras dejar atrás, sólo en parte, los diálogos por Medio Oriente y el este de Europa.

Luego de que la agenda mediática y diplomática de Estados Unidos fue copada por los incidentes registrados en Medio Oriente tras las discusiones nucleares y la escalada entre Irán e Israel, Donald Trump regresó de lleno al plano de los aranceles.
El presidente estadounidense realizó nuevos movimientos en el campo donde generó mayor incertidumbre y temor a nivel global, afectando desde sus socios más cercanos en la región o el viejo continente, hasta presiones con China, rival económico directo.

Sobres los países más afectados por su política y la situación particular de Argentina, Joaquín Bernardis, del Observatorio de Política Internacional (OPI) de la Universidad Católica de Santa Fe, habló en CyD Litoral.
Luego de las tumultuosas semanas de protagonismo bélico, los aranceles volvieron a mover las agujas a nivel mundial. “Donald volvió con su juguete favorito. Ya desactivo todo lo del tema de Irán, medianamente dejó contento a Zelensky la última semana, dándole algunos misiles para continuar el combate con Rusia y aclarando que lo tiene que financiar la Unión Europea (UE), y retomó este instrumento”, indica Joaquín Bernardis.
“Era uno de sus puntos claves durante la campaña y la primera parte del año lo implementó de manera sistemática. A la mayoría los puso en stand-by, pero volvió al contraataque”, agrega el especialista.

Respecto al momento de impacto, Bernardis expresó: “Pongamos con deadline el 1 de agosto. Sería en el que empezarían toda la batería de aranceles. El primero sería Brasil, por el tema del juicio a Jair Bolsonaro”.
“También durante la última semana volvió al contraataque con la Unión Europea con 30% de aranceles, principalmente en industrias críticas, productos farmacéuticos, automotriz, muy importante para la economía europea. Con sus aliados en Norteamérica también: Canadá 35% y México 30%”, detalló Bernardis.
“Lo que sí vimos tal vez de esa primera batería en marzo, abril y mayo es que Trump, establece los aranceles, te presiona y luego saca el pie del acelerador. Hace mucho ruido”, comentó el licenciado en Relaciones Internacionales sobre la forma de proceder del mandatario.

En conceptos más personales sobre la actitud de Trump durante este periodo, Bernardis indicó: “Está en su segundo mandato, ya sin ningún tipo de escrúpulos”. Este punto también se puede vincular con sus peculiares apariciones y declaraciones, desde las iniciales con objetivos de compra de Groenlandia, hasta los festejos con el plantel del Chelsea en el Mundial de Clubes de la FIFA.
Retomando la senda del análisis arancelario, Bernardis remarcó que “lo que hizo fue inicialmente aplazarlo, no cerrarlo. Un estado de negociación latente. Hay que ver qué momento define que no se complieron las condiciones para los vuelva a aplazar y los termine estableciendo. Eso sería un punto importante”.
“En los mercados no hubo tanta volatilidad como en abril. En este caso no tanto porque vieron el historial y hay expectativa de que se reduzcan o se vuelvan a aplazar”, destacó sobre un panorama más estable registrado en la mayoría de las bolsas, luego de los sacudones que golpearon desde Tokio hasta Wall Street.
Bernardis comentó respecto a algunos avances de la gestión desde Washington: “Los EEUU lograron solo tres acuerdos comerciales: China, Vietnam y Reino Unido. India, Japón y Corea del Sur están a punto de cerrarse. A Japón y Corea del Sur también le establecieron aranceles”.
“El resto de países tienen el arancel de piso recíproco de 10%. Por ejemplo, Argentina. Pero, en acero y aluminio, muy importante para nosotros, tenemos 50%”, sostuvo con una mirada ya en terreno local.

“La Cancillería y la embajada argentina en Estados Unidos se encuentran en un proceso negociador porque EEUU estableció una serie de pelotones para negociar las nuevas relaciones comerciales. Nosotros estaríamos en un segundo plano”, describió sobre el lugar donde el país está parado.
También expresó: “Hay un tercer plano de países que serían muy poco importantes. Por esta relación política entre Javier Milei y Trump, subimos un escalón. En el primero vendrían a estar ‘los más fuertes’ y países en la mira de Trump”.
Luego, comentó sobre la situación particular y los posibles impactos en la economía local: “Argentina está avanzando con un listado de aproximadamente 80 productos o posiciones arancelarias, de forma técnica, que representaban un porcentaje muy importante de nuestra canasta exportadora. Se busca que estos aranceles del 10% sean mucho menores, con un tope del 7% para reducir el impacto”.
Además de la presión económica ante Brasil por el caso de Jair Bolsonaro, ex presidente al cual la Procuraduría General de la República (PGR) definió “principal articulador y mayor beneficiario" de las acciones para implantar un golpe de Estado en 2022, Washington investiga al gobierno de Lula da Silva.

Este martes, la Oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos anunció que abrirá una investigación sobre las políticas comerciales brasileñas conforme a la Sección 301 de la Ley de Comercio de 1974.
Bajo instrucción directa de Trump, se analizarán "los ataques de Brasil contra empresas estadounidenses de redes sociales, así como otras prácticas comerciales desleales que perjudican a compañías, trabajadores, agricultores e innovadores tecnológicos norteamericanos", señaló la oficina en un comunicado.
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