Jueves 18.2.2021
/Última actualización 14:58
La noche del 14 de febrero, el día de los enamorados, un hombre golpeó al hijo de su pareja y los amenazó de muerte para que no acudieran a la policía. Su padre, José Luis Catuzzi, fue condenado a prisión perpetua por el femicidio de Ariadna Sandoval el 30 de diciembre pasado.
La fiscal Jorgelina Moser Ferro interviene en la causa e imputó a José Luis Exequiel Catuzzi -nombrado como su padre y su abuelo- la autoría del delito de amenazas coactivas, ya que si bien en el acta consta que golpeó a su hijastro, no se constataron lesiones. El defensor público Gustavo Durando representó al imputado en la audiencia realizada el martes feriado, que fue presidida por el juez de la IPP Gabriel Candioti.
Eran alrededor de las 21 del domingo cuando Catuzzi hijo y su pareja arribaron a su domicilio en la ciudad de Recreo, donde los esperaba su hija de 5 años junto al hijo de 18 de la mujer y su novia. La niña le contó a sus padres que esa tarde su hermano la había llevado a la plaza, y esto enfureció a Catuzzi.
Flavio Raina El día del hecho José Luis Catuzzi (52) se identificó como policía y aseguró a sus colegas que su pareja se había arrojado del vehículo durante una discusión.El hombre comenzó a increpar al adolescente, diciéndole que "él no es nadie para sacar a mi hija a la plaza" o "para hacerla salir a la calle", para luego golpearlo con sus puños en la cabeza y en la espalda.
Como el muchacho se encontraba sobre un sillón, Catuzzi levantó el mueble, haciéndolo caer sobre una silla. La madre del joven intervino rápidamente, cubriendo a su hijo con su propio cuerpo para evitar que la agresión continuara, mientras el adolescente pedía disculpas.
"Ahh, ¿ahora me pedís disculpas? Tenés miedo, viste lo que es…" respondió el ahora imputado. Ante la súplica de la mujer, se retiró a otra habitación de la casa, y en ese momento ella tomó a la niña, que se había escondido debajo de un sillón, y junto a su hijo salieron del domicilio "despacito".
Ya en la vereda, le pidió a un familiar a través de whatsapp que contactara al 911 mientras se acercaba a un vecino, a quien le rogó "que buscara un patrullero porque nos iban a matar".
La mujer ingresó a su domicilio nuevamente y Catuzzi, al verla, le dijo que si llamaba a la policía la mataría a ella y a sus hijos. La amenaza sucedió en un contexto de violencia de género e intrafamiliar. Si bien es la primera denuncia en su contra, la relación de pareja se tornó violenta hace años y, según consta en la causa, tampoco era la primera vez que golpeaba al joven.
Luego de la atribución delictiva, Catuzzi hijo recuperó su libertad bajo estrictas normas. Entre ellas, una medida de distancia de 300 metros respecto de ambas víctimas, así como una prohibición de contacto de todo tipo, y la obligación de presentarse ante el Ministerio Público de la Acusación una vez al mes.