El pasado 21 de diciembre comenzó el verano en el hemisferio sur, pero en Santa Fe, desde mediados de noviembre, se padecen las altas temperaturas y el gran porcentaje de humedad.

Viví Mejor dialogó con un cardiólogo y un entrenador acerca de las mejores formas de realizar ejercicio durante las altas tempraturas que predominan en Santa Fe y gran parte del país.

El pasado 21 de diciembre comenzó el verano en el hemisferio sur, pero en Santa Fe, desde mediados de noviembre, se padecen las altas temperaturas y el gran porcentaje de humedad.
Para seguir haciendo ejercicio durante las olas de calor, el cardiólogo Daniel Croce (Mat. 5489) y el profesor de actividad física Lautaro Cáceres brindaron recomendaciones a Viví Mejor para mantenerse en movimiento sin comprometer la salud.
"El calor extremo obliga al cuerpo a hacer un sobreesfuerzo para regular su temperatura, por lo cual durante el ejercicio aumenta la frecuencia cardíaca, se produce mayor sudoración, se pierden agua y sales y disminuye la presión arterial. Esto puede llevar a una fatiga precoz, mareos, deshidratación y descompensaciones, especialmente si no se toman precauciones" destacó el cardiólogo.

Croce detalló cuáles son los síntomas de alarma a prestar atención durante el ejercicio: mareos, sensación de desvanecimiento, dolor de cabeza y cefalea intensa, náuseas o vómitos, calambres musculares, sudoración excesiva o en casos graves: piel seca y caliente, confusión, desorientación o palpitación.
Si esto suscede se debe suspender de forma inmediata la actividad física, trasladarse a un ambiente fresco con sombra, liberarse de la ropa y enfriar el cuerpo con pañuelos húmedos o agua fresca y fundamentalmente, consultar a un médico de urgencia si se presenta confusión o pérdida de conocimiento.

Por su parte, Cáceres expresó: "El calor no es para todos igual; a mayor duración del entrenamiento, aumenta el riesgo y si va acompañado de mucha intensidad, peor aún".
"Es importante regular la intensidad, aumentando también los descansos si es necesario. Escuchar al cuerpo y no guiarse solamente por la planilla. El cuerpo entiende de estimulos, no de kilos. Por eso es que, si un día no podemos levantar el mismo peso, no pasa nada. El calor juega un papel muy fuerte en el cuerpo", agregó.
Además, el profesor destacó qué tipos de entrenamiento requieren prestar atención durante las olas de calor: "En los ejercicios de fuerza se debe fundamentalmente respetar las pausas; durnate el cardio, a mayor tiempo de actividad, más aumenta el riesgo y por último es necesario prestar debida atención a entreamuientos intermitentes como el Hiit, ya que si no se controla, es muy riesgoso".

"La forma correcta de hidratarse en verano es antes de comenzar el ejercicio y durante con pequeños sorbos cada diez o 20 minutos. Posteriormente a la activdad, es importante reponer líquidos y sales y no esperar a tener sed", indicó el especialista.
Las horas recomendadas para realizar actividad física en verano son entre las 6 y las 9 de la mañana y entre las 19 y las 21.30. Es fundamental evitar el ejercicio entre las 10 y las 17.
"Algunos consejos prácticos son usar ropa clara y liviana, protegerse del sol, hidratación constante y no entrenar en dias de calor extremo. Es fundamental adaptar el ejercicio al clima y que la hidratación sea constante pero estructurada. Siempre tener en cuenta que hay que priorizar la salud antes que el rendimiento", concluyó Croce.