El gobernador confirmó que a esta altura del año, la provincia tiene un déficit acumulado del orden de los 500 millones de pesos, y que hay una merma en el nivel de ingresos provinciales. “Esos son los números -admitió-. Nosotros hemos aumentado salarios el año pasado en dos oportunidades, este año también; los sueldos que se incrementaron están por encima de los números del Ipec, por lo tanto, son números que se merecen los trabajadores pero que en una situación de estancamiento como en la que estamos ahora, son difíciles de poder pagar”.

































