El gobierno de Hermes Binner tiene en gestión varios encuentros con ministros de la Nación. Por lo pronto, para el jueves ya se ha concertado una audiencia con el ministro de Economía, Martín Lousteau, y se ha solicitado otra con el titular de Infraestructura Federal, Julio de Vido, pero sobre ésta todavía hasta hoy no había respuesta. En reiteradas ocasiones, el mandatario ha planteado que las retenciones que aporta Santa Fe a la Nación deben volver en obras al territorio.
Por su parte, las autoridades del Ministerio de Trabajo han pedido una reunión con Carlos Tomada. Por ejemplo, en el ámbito del área laboral del gobierno, no se ha tenido otra información sobre el plan de capacitación para la incorporación de jóvenes al circuito económico, que la semana pasada anunció la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que fue suministrada por los medios de prensa.
En Economía
Con Lousteau habría por los menos dos ejes temáticos: por un lado, las relaciones económicas entre la Nación y la provincia _la primera, entre otros rubros, adeuda fondos para enjugar el déficit de la Caja de Jubilaciones y Pensiones. Asimismo, con seguridad, Santa Fe solicitará por medio del ministro Angel Sciara mayor financiamiento con origen en el BID, para la construcción de los planes de urbanización Hábitat y Escuelas, que en la administración anterior no fueron utilizados por falta de presentación de proyectos.
Pero, además, de Lousteau dependen las secretarías de Agricultura, Ganadería y Pesca y de Comercio, cuyos titulares Javier de Urquiza y Guillermo Moreno, respectivamente, no exhiben los mismos criterios para el tratamiento de las políticas de producción y de precios correspondientes a las cadenas de carnes y de lácteos. Respecto de esta última, días atrás se firmó un entendimiento con las autoridades nacionales para fijar por seis meses el valor de la leche al productor. El Grupo Lácteo tenía previsto reanudar las reuniones con la Nación para continuar analizando medidas que permitan a los sectores involucrados un horizonte más amplio que el plazo considerado en el acuerdo.
Frigoríficos
Existe una marcada preocupación en la cadena cárnea por la situación de los frigoríficos. Como se sabe, mayoritariamente, en el territorio santafesino están ubicadas las plantas que exportan la Cuota Hilton _para las cuales debieron hacerse importantes inversiones_ y últimas disposiciones de la Secretaría de Comercio incorporaron al cupo de exportación habilitado, las ventas al exterior de las carnes termo procesadas, que no se consumen internamente en el país y para las cuales sí hay mercados externos. Actualmente, están autorizadas unas 40.000 toneladas mensuales para el total de plantas frigoríficas del país.
Ello obligó a disminuir la faena por parte de los frigoríficos con derivación de problemas en el campo laboral. Además de Friar SA, que ya concretaron cesantías en las plantas de Santa Fe y Desvío Arijón, otros frigoríficos han producidos despidos o los están analizando como alternativa. Incluso, el viernes pasado, el titular de la CGT, Hugo Moyano, le hizo saber a Lousteau la preocupación sindical por este tema.
Otra arista del tema es la marcada por un comunicado de Confederaciones Rurales Argentinas conocido este mediodía. La entidad expresa su preocupación por los 277 operarios del sector despedidos la semana pasada pero, además, advierte que el crecimiento de la faena tiene su explicación en la mayor matanza de vientres. La entidad consigna que se vienen dando ``14 meses ininterrumpidos de liquidación de vientres'' y que tomando como base los once primeros meses de 2007, el 47,2% fueron hembras dentro de la faena total.
En el Ministerio de la Producción se comenzó a analizar un plan de salida para la cadena cárnea a fin de llevar a la Nación, pero lo que es innegable es que los actores del sector cifran sus esperanzas de que el gobierno nacional revierta su posición sobre el cupo exportador y lo amplíe. También existiría inquietud por las sucesivas compras de estas industrias por parte de grupos brasileños. Tanto Brasil como Uruguay han incrementado su participación en el mercado mundial de carnes.
Corredores viales
El futuro de los corredores viales nacionales en territorio santafesino y la necesidad y la posibilidad de discutir una nueva ley de coparticipación federal de impuestos fueron los ejes centrales del encuentro que el gobernador Hermes Binner mantuvo con el senador nacional por Santa Fe, Rubén Giustiniani. La mesa socialista de análisis se completó con el intendente de Rosario, Miguel Lifschitz, y el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Antonio Bonfatti.
``Es un año propicio para discutir ambos temas'', le dijo Giustiniani a El Litoral a la salida de Casa de Gobierno. El senador santafesino antes había estado saludando al intendente local, Mario Barletta. La prolongación del encuentro con Binner le hizo postergar la visita al intendente santotomesino, Fabián Palo Oliver.
El próximo mes de octubre vencerá el actual sistema de peaje en rutas nacionales. ``Estamos analizando hacer una propuesta donde el concesionario además del mantenimiento de las rutas esté obligado a incorporar obras nuevas y generar autovías y autopistas especialmente en la provincia de Santa Fe'', destacó el senador.
Explicó que ``en la provincia existen 2.500 km de rutas nacionales bajo el sistema de peaje cuyos contratos de concesión finalizan en octubre de 2008. Ante esta situación y la alta estadística en accidentes de tránsito, la posibilidad de planificar un nuevo sistema -cuando se llame nuevamente a licitación- garantizaría la realización de nuevas obras viales''.
El gobierno nacional no ha hecho público hasta el momento cómo será el futuro del sistema y el gobernador ya solicitó una audiencia al ministro de Planificación e Infraestructura, Julio de Vido, por el tema de los corredores. De todas maneras, Giustiniani llevará la propuesta al papel para presentarla en la Cámara Alta.
El actual sistema de peaje reemplazó al instaurado en los 90 donde el concesionario cobraba y debía realizar las obras y el mantenimiento de la rutas. Hasta octubre las obras las realiza el gobierno y el concesionario tiene a su cargo el mantenimiento.
Teresa Pandolfo/ Mario Cáffaro






























