Acusado de asesinar a su esposa se negó a declarar

El hombre acusado de asesinar de once puñaladas a su mujer tras salir de prisión gracias a que ella supuestamente lo perdonó por haberla violado y se casó con él, se negó hoy a declarar ante la Justicia de General Pico, La Pampa, informaron fuentes judiciales.

Se trata de Marcelo Tomaselli (26), a quien se le atribuye el asesinato de Carla Figueroa (18), madre de su hijo de 3 años, que estaba con ella al momento del crimen.

El hombre se negó a declarar hoy ante el fiscal Penal de General Pico Alejandro Gilardenghi, a cargo de la causa, por consejo del defensor oficial Walter Vaccaro, quien tomó la defensa hace pocas horas, tras la renuncia de su anterior letrado, Armando Agüero.

Precisamente fue a raíz de una presentación realizada por el abogado Agüero que la Justicia de General Pico le concedió a Tomaselli la libertad por "avenimiento" o perdón de la víctima en el marco de la causa por la violación de su pareja.

Es que, supuestamente, Figueroa lo perdonó por ese abuso y se casó con él, lo que motivó que la Justicia le concediera la libertad al hombre.

No obstante, el sábado último, a seis días de la liberación de Tomaselli, Figueroa fue asesinada de 11 puñaladas en la casa de su suegra, donde vivía con su hijo.

Tras la denuncia de la propia madre del acusado, éste fue detenido y trasladado a la seccional segunda de General Pico, donde, según fuentes policiales, intentó ahorcarse con sus propios pantalones.

Esta mañana, el acusado fue llevado a los tribunales y, tras negarse a declarar ante el fiscal, fue nuevamente conducido a la dependencia policial.

En tanto, los investigadores procuraban obtener mas pruebas del episodio y, en ese marco, tomaron declaración a la madre del sindicado asesino, que estaba en la casa junto al pequeño hijo de la pareja cuando se cometió el homicidio.

Esta mañana la hermana de la joven asesinada, Soledad Reynoso, quien quedó al cuidado del niño de la pareja, aseguró que fue precisamente la madre de Tomaselli, quien "armó" todo para que éste saliera de la cárcel.

El acusado estaba preso por violar en abril último a Figueroa durante un encuentro que habían acordado para conversar y tratar de recomponer una antigua relación que había terminado.

Pero, según la pesquisa, el hombre la pasó a buscar en una moto, la llevó hasta un descampado y la violó, por lo que fue denunciado y detenido.

Durante su encierro, que se prolongó ocho meses, la mujer lo fue a visitar y a llevarle comida, hasta que en octubre último se casaron.

El abogado de Tomaselli pidió entonces la liberación de su asistido por "avenimiento", ya que la mujer supuestamente lo había perdonado y ambos planeaban reiniciar una vida junto a su hijo.

Por mayoría, los jueces del Tribunal de Impugnación Penal de La Pampa accedieron al pedido y el hombre salió de prisión seis días antes del asesinato.

El juez Carlos Flores, que falló a favor del hombre, sostuvo que "creyó que la víctima deseaba la libertad de su victimario para reconstruir la relación", mientras el magistrado Pablo Balaguer se opuso al argumentar que con la liberación del acusado de violación "no se estaba protegiendo a la víctima".

Por su parte, el presidente del Tribunal, Adolfo Jensen, votó a favor de la liberación de Tomaselli al destacar que más allá de la desconfianza que generaba la situación no iba a cometer "el error de negarle la oportunidad a quien lo peticiona, de perdonar a su agresor y de convivir con él si así lo desea".

Esta mañana, en una entrevista con radio LU de General Pico, el fiscal general de esa ciudad, Carlos Salinas, cuestionó duramente a los magistrados que accedieron al pedido de la defensa y consideró que "si tuvieran dignidad tendrían que renunciar" porque "es una vergüenza".

Por su parte, la vicegobernadora de La Pampa, Norma Durango, sostuvo que "falta sentido común en los fallos" y que "la justicia tiene que profundizar su tarea con perspectiva de género", ya que "estaba cantado que esto iba a pasar".

En tanto, integrantes del Movimiento de Derechos de las Mujeres de General Pico cuestionó el accionar de la justicia y clamó para que "no haya más Carlas", al tiempo que un grupo de mujeres se reunió en el edificio judicial de Santa Rosa para repudiar el fallo.

La decisión judicial es repudiada desde todos los sectores de la comunidad, ya que al parecer la víctima no tenía apoyo de ningún tipo, estaba sola, dependía emocional y económicamente de Tomaselli, a quien temía, y había vivido una historia trágica en su infancia, cuando su padre asesinó a su madre cuando ella tenía sólo ocho meses, contaron fuentes de la pesquisa.

Télam