Tras el abandono de la escuderia nipona Honda, la Fórmula 1 vuelve a recibir un nuevo golpe con el anuncio de la retirada al final de la presente temporada del constructor alemán BMW, anunciada este miércoles en un contexto de crisis económica internacional.
BMW indicó este miércoles en un comunicado que "no renovará su compromiso en la Fórmula 1 luego del final de la temporada 2009", una decisión que fue adoptada por "la nueva dirección estratégica de nuestra empresa", afirmó el patrón del constructor, Norbert Reithofer, citado en dicho comunicado.
"Lo importante es dar prioridad a una política de gestión duradera y favorable al medioambiente", agregó Reithofer.
Este duro golpe al deporte del autómovil nunca se atisbó en el mundo de la Fórmula 1 pese a que los rumores de los abandonos de otros equipos, como Renault y Totoya, no han dejado de recorrer los boxes.
Precisamente este miércoles, la escudería Toyota confirmó que seguirá participando en el Mundial de la Fórmula 1.
"Gracias a la reducción de costes, continuaremos nuestras actividades en la Fórmula 1. Nuestra situación queda como está", declaró un portavoz de Toyota, haciendo referencia al nuevo reglamento de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) para la competición de 2010.
La escudería BMW Sauber ocupa la octava posición en la clasificación de constructores del Mundial de Fórmula 1 pero, pese a los malos resultados en la presente temporada, Reithofer aseguró que la decisión de abandonar la Fórmula 1 "es difícil".
BMW volvió a la Fórmula 1 en 2000 y, en 2005 compró la escudería suiza Sauber, con el que formó el equipo BMW Sauber, cuyos colores son el azul y el blanco del Estado regional alemán de Baviera (sur de Alemania).
El alemán Nick Heidfeld y el polaco Robert Kúbica compiten para la escudería en el Mundial de Fórmula 1, una participación en la que BMW Sauber emplea a unas 730 personas.
Sin embargo, la actulal crisis económica internacioal hace daño a BMW.
En 2008, sus beneficios bajaron un 89,5% respecto a 2007 y, en el primer trimestre de 2009, las ventas han caído un 19,5%, pese a lo que los directivos de la empresa alemana niengan que el abandono de la Fórmula 1 se deba a la crisis.
Para la FIA, el abandono de BMW es lamentable, pero según manifestó este miércoles la organización que preside Max Mosley, no es una decisión sorprendente.
"Si las nuevas reglas sobre la limitación presupuestaria huebieran sido aceptadas por todos, la retirada de BMW podría haberse evitado", señaló la FIA en comunicado, haciendo alusión a las nuevas reglas del Mundial previstas para 2010.
"No podemos esperar que los constructores continúen aportando cantidades enormes de dinero a la Fórmula 1 cuando su supervivencia depende de despidos, cierres de fábricas y de ayudas públicas", añadió.
Si el futuro de BMW no irá más allá de la presente temporada, no es el caso de Sauber, pues este miércoles los miembros de la Asociación de Escuderías de Fórmula 1 (FOTA) indicaron que ayudarán al equipo suizo.
Las escuderías "están listas para asegurar el apoyo necesario a la escudería suiza", declaró el secretario general de la FOTA, Simone Perillo.
AFP































