"Nos vamos acercando al precipicio y nadie atina a hacer nada, nadie aprieta los frenos o dobla el volante. Parece que los que tienen a su cargo la tarea de conducir el país no tuvieran capacidad de reacción", criticó el intendente Miguel Lifschitz, quien en diálogo con un medio radial de Rosario fustigó duramente al gobierno nacional en lo vinculado al conflicto agrario y su contraprotesta camionera, que además de complicar la circulación en las principales rutas de la región amenazan con desabastecer a la zona. "Parece que no tienen conciencia de la gravedad de la situación y de las consecuencias que puede traer. El riesgo en que se pone, no ya la Economía, sino la institucionalidad", sostuvo.
El socialista, quien evaluó que la situación en Rosario "no es preocupante" por el momento, consideró que la situación actual "fue provocada por una decisión gubernamental que, más allá de que sea legítima o no, fue el disparador de conflicto y no ha habido capacidad (por parte del gobierno) para resolverlo y encauzarlo. Se ha ido de las manos". Y sentenció: "Resolverlo hoy es más complejo de lo que era hace 90 días".
Lifschitz, quien aseguró estar en contacto con el gobernador Hermes Binner, pero además con legisladores nacionales y provinciales, pidió a los diputados y senadores "generar un marco de mediación que permita zanjar esta confrontación, que se ha tornado anárquica", ya que "hoy ya no se sabe quién promueve cada uno de los cortes".
"Me parece que la Legislatura podría ser una buena manera de promover alguna convocatoria. Creo que las instituciones democráticas, mas allá del gobierno, no pueden permanecer ajenas a lo que sucede", aseguró. "El parlamento nacional puede ser un ámbito para instalar el tema, que haya discusión, debate".
De todos modos, consultado por Novaresio, no descartó la posibilidad de ir en masa con intendentes de la región centro a la Casa Rosada para pedir una rápida solución al conflicto. "Evidentemente, algo está fallando para que las instituciones de un país no puedan encaminar y resolver un conflicto de esta naturaleza", insistió.
Sobre la situación en la ciudad, el intendente fue positivo. "Afortunadamente, creo que en Rosario hoy no tenemos una situación preocupante", evaluó. Detalló que "están garantizados los servicios públicos esenciales y los alimentos", aunque reconoció que existen "problemas con el combustible". "Pero la vida de la ciudad por unos dias no deberia tener dificultades, mientras se resuelve el conflicto", concluyó.
Fuente: Rosario 3
































