Reinaldo Merlo dejó de ser abruptamente el entrenador de Rosario Central pese a haber sumado solo una derrota desde que dirigía al equipo, en tanto los dirigentes, sorprendidos por la decisión del técnico, le propondrían a Miguel Angel Russo hacerse cargo del plantel.
Mostaza Merlo argumentó, según confiaron fuentes centralistas, que carecía de fuerzas para seguir y que el conflicto con Ezequiel González erosionó la situación.
Russo aparece como el hombre más buscado aunque su salida reciente de San Lorenzo, cuyo conflicto interno parece potenciarse con las horas, pone en duda una vuelta a Arroyito.
La otra alternativa que se barajaba en Rosario es la de Leonardo Astrada, pero su incómoda relación con Cristian “Kily” González, quien si bien no juega pero es referente natural en el plantel, pone trabas a un eventual acuerdo.
Ayer por la tarde Merlo dirigió la práctica vespertina y por la noche convocó a dirigentes de los auriazules al hotel Ros Tower, donde se hospeda desde que llegó para dirigir a Central.
Integrantes de la comisión de fútbol, encabezados por Manuel Usandizaga, hijo del Horacio, el presidente del club escucharon sorprendidos el anuncio de Merlo de que se iba del club.
Fuentes dirigenciales dijeron a DyN que Merlo adujo que ya “no tenía fuerzas” para seguir y destacó el desgaste que produjo el conflicto que disparó Ezequiel González, con sus declaraciones tras la victoria sobre San Martín de Tucumán.
El Equi consideró que Central era “un desastre” como jugaba. Según se dice, Merlo había dicho ante el plantel que eso se interpretaba como una “traición”.
Pero tras el partido que perdió ante Racing, Merlo subrayó que todo eso estaba superado y que le había pedido al presidente del club que no haya sanciones para el jugar.
También aseguró que iba a dar “todo” para evitar que Central se vaya al descenso y hasta anunció que había que empezar “de nuevo” en esta semana.
Sin embargo, ante Usandizaga hijo y sus compañeros de comisión dijo ahora que no tenía más fuerzas.
Los dirigentes intentaron convencerlo, pero, confiaron, Merlo “ya lo tenía totalmente elaborado”.
Merlo había asumido oficialmente el martes 3 de marzo diciendo que todos los partidos los iban a jugar como verdaderas finales porque el objetivo era salir “primero” en el mini torneo compuesto por los conjuntos que peleaban por conservar la categoría.
En total dirigió 5 partidos, con 3 victorias (San Lorenzo, Arsenal y San Martín de Tucumán), 1 empate (Vélez) y 1 derrota (Racing). Consiguiendo 10 de 15 puntos posibles.
Rápido por las necesidades, pues Central está en zona de promoción, los directivos centralistas salieron a buscar técnico.
Russo fue la primera persona en que pensaron, a sabiendas que se encontraba en Rosario por razones familiares.
El conflicto en San Lorenzo y su salida fresca de ese club, cada vez más convertido en un polvorín, podrían frenar la vuelta al club de Arroyito, que ya dirigió.
Por lo pronto, Ariel Rubén Cuffaro Russo, técnico de la cuarta división de AFA, se hacía cargo de las prácticas en Arroyo Seco.
El sábado, Central tendrá un partido de enorme importancia ya que enfrentará a Gimnasia y Esgrima en La Plata, y de perder, el Lobo lo alcanzará en los promedios.
Fuente: DyN






























