"Siempre han sido mi preocupación las causas relacionadas con delitos graves como los de lesa humanidad y otras que pongan de manifiesto la falta de honorabilidad para ocupar cargos políticos de los implicados. Me estoy refiriendo a la aptitud moral para el desempeño en la función pública”, señala en sus fundamentos la diputada Gutiérrez.
Después pasa a explicar las declaraciones del condenado Constanzo referidas no sólo al accionar de represores sino también sobre al de la Triple A.
Constanzo relató que “cuando en la Asamblea Legislativa debían elegir a los senadores nacionales, los postulantes eran Luis Rubeo (p) e Ítalo Luder. El primero necesitaba del voto de varios legisladores provinciales que se oponían. El dirigente justicialista rosarino le requiere un favor pidiéndole que le coloque una bomba al diputado Carlos Perretta, para que éste lo vote ya que, según palabras de Constanzo, varios legisladores le habrían pedido a Rubeo 50.000 dólares y que sólo con el correr de los días habían bajado su pretensión a 25.000. El mismo (Constanzo) le dijo que a Perreta no lo conocía y que no disponía de los medios para adquirir una bomba. Fue ahí donde, según sus propias palabras, Rubeo padre le informa que ellos se la facilitarían, y que fue el actual diputado Luis Rubeo (h) quien se la entregó. Que el declarante mismo colocó el explosivo que detonó frente a la casa del diputado Carlos Perreta, que intimidado por esta acción votó por Luis Rubeo (p) para que fuera senador nacional”.
Agrega Gutiérrez que como “legisladora y militante, ha sido la defensa de la ética en la política y la coherencia con nuestros principios democráticos. Ésos fueron los motivos que me llevaron a tomar en su momento las acciones legales que inicié contra Mario Facino o Pedro Rodríguez, a quienes impugné por sus antecedentes como partícipes del terrorismo de Estado, y cuya separación judicial terminó sumando calidad republicana en Santa Fe”.































