El chico que le llevaba flores a su novia y terminó asesinado de dos tiros

Por Danilo Chiapello
dchiapello@ellitoral.com

- "¿Sabés quién es el muchacho que mataron en el Puente Negro?"
- "Charly, el chico que trabajó un tiempo en la sodería.”

El diálogo de referencia hoy podía escucharse entre distintos grupos de vecinos de barrio Schneider, los que no lograban salir de su asombro.

Es que los datos más recientes de la víctima remiten a este negocio ubicado en Milenio de Polonia al 3900 donde Charly, hace bastante tiempo atrás, supo ganarse unos pesos.

Quienes alguna vez entraron en contacto con el lo recuerdan como un muchacho sencillo, trabajador y de pocas palabras.

A la vuelta de la sodería se encuentra la casa de los abuelos de Charly, personas muy importantes en la vida de Charly.

Es que Liliana y Babi fueron quienes con muchos esfuerzo y sacrificio cobijaron a Charly, cuando su madre partió hacia la provincia de Corrientes.

Las calles de barrio Schneider vieron crecer a este joven al que nunca le sobró nada, y que desde temprano conoció los rigores de la vida.


Dudas

“El tenía un carácter fuerte..., no se iba a dejar atropellar por cualquiera. Por eso no me cierra lo que pasó en el Puente Negro”, dijo hoy Martín, uno de sus hermanos.

-¿Cómo es eso de que tenía dos tiros de distinto calibre?. ¿Dónde está su teléfono celular? ¿Alguien tiene que haber visto al tipo que lo asesinó?

Las preguntas de Martín eran todas compartidas por familiares y allegados de la víctima, a los que el caso también les genera muchas dudas.

“Alguien nos tiene que dar una respuesta. No nos vamos a quedar con esto de que a Carlos lo mataron y se terminó”, dijo su abuela Liliana.

“Queremos justicia. Queremos saber quién mató a Carlos y por qué, narró la mujer entre lágrimas.

Los ojos de esta gente están brillosos y sus voces salen entrecortadas. Están doblemente atravesador por el dolor.

Por un lado la pérdida del ser querido. Y acentuando esta emoción sentir en carne propia el abandono y la desprotección.

“Hasta el momento nadie vino a vernos. Ni de la policía ni de la justicia. Fui yo quien corrí por los hospitales, luego por las seccionales hasta que finalmente llegué a la jefatura y me dieron bolilla. Pero yo tuve que ir”, apuntó Martín.


Últimos pasos

Una de las últimas cosas que Charly hizo antes de la fatídica noche del sábado, fue visitar a su abuelo Babi, quien hoy reside en la localidad de Sauce Viejo.

“Eso fue el miércoles”, narró hoy el hombre en diálogo con este diario. “Lo vi de excelente ánimo... estaba también muy bien vestido”.

“Me contó que estaba por conseguir un trabajo en una obra en el Parque Federal. Aunque eso le había significado una discusión con su novia”, agregó.

Por estos días se supo que Charly estaba viviendo en Monte Vera, donde había iniciado una relación sentimental con una mujer de esa localidad.

Buscando reparar los daños que había dejado esa discusión con su novia, el sábado Charly decidió sorprender a su amada con un regalo.

La última imagen de Charly con vida lo ubica esperando el colectivo en la garita de J. M. Zuviría y Aristóbulo del Valle. Estaba sentado y tenía en sus manos una maceta con flores.