Juliano Salierno
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Carina Facio miró hacia el techo de la sala, exhaló una bocanada de aire llena de dolor y dejó caer las primeras lágrimas, mientras entre abrazos y gestos de afecto repetía: “Se hizo justicia, se hizo justicia”. La mamá de Agustina, la nena de 12 años violada y ahorcada el 8 de julio del año pasado, acababa de escuchar la sentencia a “prisión perpetua” que el tribunal dictó hoy contra Javier Cristian Díaz.
La condena solicitada por la fiscalía y la querella fue impuesta por los jueces Dardo Rosciani, Norberto Nisnevich y Cristian Pablo Fiz -presidente-. El secretario penal, Jorge Nessier, leyó este lunes el veredicto que por decisión unánime y en reunión secreta se tomó el viernes pasado después de los alegatos.
El imputado, de 31 años, que volvió a la sala luego de dos jornadas de debate en las que pidió no asistir, escuchó la condena con resignación, con los ojos entrecerrados y la cabeza gacha.
Así concluyó el primer juicio oral y público realizado en la capital provincial -Primera Circunscripción- y el sexto en toda la provincia, desde que entró en vigencia la reforma al Código Procesal Penal.
Prensa y público
El cierre del juicio oral contó con la presencia de casi todos los medios capitalinos, a los cuales se les reconoció el correcto comportamiento durante el acto.
Un importante marco de público, conformado en su mayoría por miembros de la familia de la víctima, se estremeció con la lectura de la sentencia condenatoria. La sesión terminó en silencio, no hubo aplausos para el tribunal, no hubo insultos para el imputado. Sólo se abrazaron, lloraron y repitieron una y otra vez lo que tanto deseaban: “Se hizo justicia”.
Una vez desalojada la sala, los medios aprovecharon para entrevistar a los principales actores. La fiscal Graciela Parma, que trabajó junto a su colega Juan pablo López Rosas, evaluó como “excelente” la primera experiencia en el foro local. “Fue una causa muy tremenda, y excelente en rapidez, sobre todo si pensamos que a menos de un año tenemos sentencia”, dijo.
Por el lado de la querella, los abogados Eduardo Jauchen y Mario Barletta, también se mostraron conformes con el resultado del juicio. “Se corroboró lo que anticipamos”, dijo el primero de ellos, y agregó: “Se ha demostrado que con el juicio oral, la Justicia se realiza con mayor eficiencia y en un plazo razonable se decide una causa muy compleja”.
Barletta por su parte expresó que “el juicio se mostró -como lo señaló el presidente del tribunal- como un proceso muy correcto en el que todas las partes contribuyeron y realmente se ha podido terminar conforme los plazos estipulados”. Además, “quedó demostrado que el hecho por el cual esta querella comenzó acusando al señor Díaz se probó y en consecuencia la aplicación de prisión perpetua que es la pena que ésta parte había solicitado”.
Apelación
En el polo opuesto, la abogada particular de Díaz, Emma Piñeiro, consideró que “la defensa va a apelar la sentencia. Entendemos que no se ha ajustado a la realidad de los hechos como lo expresara en el alegato. Para mí, fue un abuso sexual agravado pero con homicidio preterintencional, con lo cual de ninguna manera llevaría una pena de prisión perpetua”, replicó.
Durante el juicio quedó claro que Javier Cristian Díaz, el hombre de 31 años que vivía junto a Carina Facio, la hija de la mujer -Agustina- y un pequeño de tres años hijo de ambos, violó y mató a la menor cuando su madre salió a trabajar. Él mismo lo confesó durante la instrucción y volvió a repetirlo durante la primera audiencia.
El juicio duró una semana y el tribunal necesitó tres audiencias para reunir los elementos necesarios para condenarlo. Ahora, la Cámara de Apelación Penal deberá resolver si la decisión de primera instancia fue la correcta.

































