Los granutillos de avenida Alem esperan que se les asigne un destino

Unos 15 millones de granutillos (pequeños adoquines), removidos de la avenida Alem durante las obras de ampliación, duermen el sueño de los justos en un predio ubicado en terrenos portuarios, esperando ser utilizados en distintas obras municipales, ya que desde el flamante complejo Puerto Ribera se devolvió una gran cantidad de los mismos, los cuales habían sido otorgados para su reutilización en el nuevo emprendimiento.

Cuando a principios del año pasado la concesionaria Casino Puerto Santa Fe SA se hizo cargo de las instalaciones del puerto santafesino con el fin de comenzar con las obras del hotel y casino, el municipio le cedió los granutillos para que haga libre uso de los mismos.

Según consta en El Litoral del martes 27 de marzo de 2007, el arquitecto Carlos Reinante (por entonces a cargo de Patrimonio Municipal) aseguró que “la empresa concesionaria tiene todos los adoquines que sacamos de avenida Alem para ser distribuidos en el área, además de los que están en las calles internas del puerto. Tienen que evaluar la conveniencia o no de volverlos a colocar con otra lógica, como ocurrió en Puerto Madero, que fueron intercalados con franjas de hormigón de colores, con canteros alrededor, etc.”.

Las piezas devueltas

Consultado en la actualidad sobre el particular, Rodolfo Alico, gerente comercial de Puerto Ribera, afirmó: “Eran una gran cantidad, incluso hubo parte que se entregó a la Municipalidad; pero la mayoría fue colocada en el acceso, donde hoy están. Y el resto han sido colocado dentro del complejo, en los canteros centrales”.

Desde el municipio, el secretario de Planeamiento Urbano, arquitecto Eduardo Navarro, contó que “el puerto nos ha permitido ubicarlos transitoriamente en un terreno que está adyacente al predio de la Shell, porque los vamos a ocupar después en distintos lugares de la ciudad: plazas, reguladores de velocidad, distintas obras ornamentales... Están transitoriamente acá, lo que pasa es que es una cantidad gigantesca, son como 15 millones de adoquines.

Transitoriamente porque el puerto necesita también disponer de esa superficie para sus destinos”.