"No hay de nuestra parte ninguna voluntad de firmar nombramientos por fuera de los concursos''. Así de concluyente fue -al finalizar una entrevista con periodistas de distintos medios- la vicegobernadora María Eugenia Bielsa, quien reveló que ayer no llegó al recinto un tema que había sido acordado en Labor Parlamentaria por los jefes de bloques: tratar una resolución del cuerpo para producir un innovador (casi inédito) llamado a concursos internos a fin de cubrir unos 80 cargos vacantes.
El mecanismo legal previsto dispone que para esos cargos los llamados se restrinjan primero al propio personal de la planta permanente de la Cámara (congelado en 229 personas). Que luego, en caso de fracasar el llamado, se convoque al de la Legislatura. De subsistir esta situación -y en tercer lugar- al de la Administración Pública Provincial y, finalmente, si aún no se da con la persona adecuada, al común de los ciudadanos... El sistema -aunque restrictivo- evita que se amplíe el número de empleados, que por ley ha sido congelado.
La presidenta del Senado advirtió que llamar a estos concursos "es el mecanismo que acordamos con el gremio de los empleados y el que creemos más saludable para la Cámara'', además del previsto por la ley.
También expresó que no duda que su aplicación beneficiará "a un 80 ú 85% de los empleados de la planta permanente'', ya que se valoran especialmente la antigüedad y los antecedentes en la tarea.
La iniciativa necesita de una resolución de la Cámara. Está plasmada en un grueso bibliorato de 500 páginas que la arquitecta Bielsa mostró a los periodistas (y que fue presentado a los senadores antes del receso de julio, como para que tengan tiempo de verlo). Ayer parecía haber pleno consenso para tratarlo pero eso no ocurrió.
Esta mañana, Bielsa decidió convocar al personal a su cargo y explicarle por qué no había avanzado el proyecto comprometido y acordado con la parte gremial, que pretende dar jerarquía a la planta permanente y evitar los usuales ingresos de cada fin de gestión.
Versiones y un hecho
- En estas últimas horas, antes de la sesión, hubo insistentes versiones sobre el deseo de muchos senadores de producir nombramientos, sin concursos.
- Nosotros hemos tomado una serie de compromisos con el personal de la Cámara, que en general se han cumplido, aunque nos quedan dos pendientes: blanquear por completo los ítems no remunerativos de la composición de los haberes, que lo vamos a concretar sobre el final de la gestión. Y el otro es implementar un proceso que nos parece distinto de lo que se ha hecho históricamente: llamar a concursos para todos los cargos vacantes, sobre aquellos que hoy lo están o que puedan provocar corrimientos en la estructura del personal.
Hemos trabajado desde hace un año junto con el gremio de los empleados legislativos en un nuevo organigrama, que refleja la renovación tecnológica y la informatización que se ha completado sobre los procesos administrativos y legislativos.
Ya lo tenemos listo: hoy la casa tiene 229 empleados (sin contar los colaboradores transitorios de los senadores) y además otra funcionalidad concreta. El organigrama tiene redactadas misiones y funciones para los 229 cargos y no hay ninguno sobre el que no se sepa cuáles son sus tareas, dónde y cómo las debe desempeñar y cuál es su relación jerárquica. Hemos discutido con el gremio punto por punto y elaboramos una norma elevada a la Comisión de Gestión y en esa resolución (pendiente de ser aprobada) se faculta a la Comisión de Interpretación del Estatuto para que llame a concursos, para que los tome, y haga los corrimientos correspondientes.
- ¿Hay senadores que le han planteado que quieren nombrar en la Cámara como personal permanente a sus colaboradores transitorios?
- No que me lo hayan planteado a mí. Y quiero ser absolutamente honesta: le doy una lectura a un hecho. Hoy hubo un cierto acuerdo (en la Comisión de Labor Parlamentaria) de que esto se iba a presentar en el recinto y finalmente la resolución que está en esa caja (la vicegobernadora señaló un grueso bibliorato de 500 páginas con el organigrama y los concursos) no se presentó. Evidentemente no hay una voluntad... No hubo (se corrigió) en el día de hoy una voluntad de presentarlo en esta sesión.
- ¿Por qué era importante que se tratara hoy (por ayer)?
-Porque a nosotros los plazos nos parecen importantes. No es lo mismo que un concurso se haga actualmente en plena actividad, con las previsiones del caso, a que se haga en diciembre y que así quede sospechado de haber sido hecho a último momento. Además tenemos las reservas presupuestarias para pagarle a la gente los corrimientos que provengan de estos concursos.
Estos concursos y actualizaciones en los cargos van a permitir que mejoren las condiciones laborales de alrededor del 80 ú 85% del personal de planta permanente de la Cámara.
Nos parece que debemos imponer una modalidad que no ha sido de uso, un nuevo mecanismo. Lo más común ha sido nombrar al final de cada gestión algunas personas pero no queremos que esto se repita. Pretendemos que haya concursos y así se lo hemos explicado a los legisladores antes del receso legislativo.
Durante las vacaciones dejamos el proyecto a disposición de todos los bloques con el nuevo organigrama.
Tuvimos hoy (por ayer) un primer acuerdo en la reunión de labor parlamentaria, con los presidentes del bloques, respecto de que pudiera salir hoy mismo la resolución que necesitan los concursos. Pero después, en la sesión esto no fue presentado... Debía haber sido presentado como un proyecto de resolución de Cámara y no fue así.
- ¿Ud. no cree que el que no se haya tratado hoy el proyecto no es una muestra de cierta resistencia de los senadores ante los concursos...?
- No lo sé. No es lo que se expresó hoy en la reunión de Labor Parlamentaria. Cuando nosotros contamos todo el proyecto hubo consenso. Lo mismo antes del receso. Se quedó en presentarlo sobre tablas, pero eso no ocurrió.
Luis Rodrigo































