Tras la publicación del artículo “El (des)concierto de Sumo en Santa Fe” en O sea, algunos lectores enviaron correos electrónicos con sus aportes a la reconstrucción de esta historia. Uno de ellos, el que rescatamos a continuación, es el trabajo periodístico que realizó el colega Héctor Galiano, quien en 2001 publicó en la revista “Constituyente”, de Santa Fe, un artículo titulado “El recital que no fue”.
En el mencionado artículo se ofrecen distintos testimonios y datos precisos sobre lo que fue la visita de Sumo a Santa Fe, los que aquí se reproducen:
‘Llegaron a la seis de la tarde, más o menos, pasaron por el hotel Corrientes. Lo fuimos a buscar con un amigo y nos dijeron que Luca había salido y que estaba en el bar Bowling, de la esquina de San Martín y Corrientes. Allí estaba el pelado, tomando ginebra, nos quedamos con él toda la tarde, después apareció Pettinato, también Mollo. Con el que más hablamos fue con Luca, que nos comentó que le gustaban Los Violadores, después fuimos a la prueba de sonido que se hizo en Plástico y al volver al hotel nos invitaron al recital de la noche...‘, testimonio de Jorge ‘Chino‘ Pacciti.
‘Al salir del hotel caminaron por la peatonal, Luca, Daffuncchio y Mollo (...) estuvimos en el colectivo de la banda esos minutos antes de ingresar a Plástico, estaban todos, y claro, Timmy Mc Kern. Se empezó a rumorear que no estaba la plata y que no iban a tocar, aparentemente la misma productora que los trajo había tenido un problema similar con GIT y quedaron debiendo un dinero. Luca después no contó que no estaba la plata. Ellos querían un 50% y después arreglaban, pero no hubo caso, ahí estábamos nosotros, en el colectivo, viendo como el show se frustraba. Al rato Timmy aviso que no tocaban‘. Pacciti.
Luca se bajó del colectivo y camino por la zona hasta llegar al bar Quico. Eramos 12 chicos y algunos plomos. Luca pidió una ginebra y el resto no pidió nada. Éramos como 20, y consumía uno.
-¿Cómo era Luca?
-Muy sufrido, muy tierno. Nos contó que había venido de Europa escapando de las drogas. Lo ví mal, decía que todo se basaba en el amor (...) era simple, a pesar de venir de una familia acomodada.
-¿Hablaba del vicio de la ginebra?
-Sí, nos comento que el peor vicio que había encontrado en nuestro país era el alcohol, que vivía tomando ginebra a cualquier hora del día. Luca era un tipo muy solo, que se mezclaba con cualquier ciudadano, decía que le gustaba mucho Buenos Aires. Es raro, conocía a muchas personas pero nadie pudo evitar el final que tuvo.
-¿Se enojó porque había poca gente que compró la entrada?
-Un poco sí, pero él quería tocar igual, el resto no.
-¿Hablaron de política en aquel entonces?
-Muy poco, Luca no creía en los políticos. Comentaba que la política era muy mentirosa y poco realista.
-¿Y de mujeres?
-Sí, bastante, Nos decía que a la mujeres había que quererlas, no comprenderlas. Muchas mujeres que compartieron tiempo con el lo recuerdan con cariño.
Ramiro Relañez, otra de la personas que entreviste, me comentó que fue al recital a pesar que ese día tenia dos recepciones y que un total de 54 personas había comprado la entrada al show en Plástico. Por ese entonces el boliche andaba muy bien, con 2.500 tickets vendidos por turno, pero ese día entre tarjeteros y asistentes, no sumaban más de 100. Y eso que la banda ya era muy grosa. ‘Nos dijeron que por un problema de salud de Luca no tocaban. Imaginate, los músicos afuera, el colectivo afuera... El boliche nos quería resarcir con entradas para el próximo fin de semana y el pase libre si volvían alguna vez‘. Relañez igual había visto a la banda en Buenos Aires, mezclado con punks, amantes de Riff, del reggae y de los Redondos. ‘Se hacía pogo‘, recuerda. Conoció de pasada a Luca y también a Pettinato. ‘Luca era un tipo muy sensible, no se repiten seguido los Luca o los Jim Morrison, era muy sufrido, sacaba poesía de las cosas más desgraciadas y oscuras‘




























