Los padres llevan a sus hijos al médico para que dejen de fumar

Mariana Rivera - mrivera@ellitoral.com

Neumonólogos de nuestra ciudad están recibiendo numerosas consultas de padres de jóvenes y adolescentes para ver de qué manera pueden ayudarlos a dejar de fumar. Incluso, están advirtiendo que también llegan a la consulta jóvenes de 18 ó 19 años para abandonar el consumo de tabaco, hábito que provoca enfermedades y muertes en la población.

“Hay conciencia de la población en general sobre los perjuicios que trae el cigarrillo, incluso dentro del grupo de los fumadores. Saben que es un problema pero una vez que la adicción está instalada es muy difícil ponerse firme y dejar de fumar”, aseguraron los Dres. Héctor Fadul, Virginia Larivey y Marta Arce, quienes recientemente asumieron la conducción de la Asociación Santafesina de Neumonología.

Sin embargo, plantearon que “el problema es que el tabaquismo es una adicción que no tiene trabas sociales; por el contrario, no tiene ningún impedimento. Es perverso que se vendan los cigarrillos sueltos en los bares o en los quioscos porque es la mejor manera de que los más chicos comiencen con esta adicción, ya que no tienen dinero para comprarse un atado de cigarrillos”.

Según explicaron, la OMS considera al tabaquismo como una epidemia y calcula que para 2030 morirán 7 millones de personas en países en vías de desarrollo de las 10 millones de muertes mundiales que hay por esta causa.

Asimismo, aclararon que “el otro gran problema es el tabaquismo pasivo, es decir, el humo ajeno que tira la gente que está fumando y que tiene consecuencias cardíacas. Es notable lo que ha disminuido en nuestra provincia los problemas cardiovasculares después que se instaló en Santa Fe la ley antitabáquica (N° 12.432), según un estudio que se hizo en colaboración con Estados Unidos. Lo peor es que un alto porcentaje de las muertes que son atribuibles al tabaquismo pasivo en el mundo corresponden a niños porque estos chicos están fumando el humo ajeno y nadie los protege. Nuestra ley provincial es un ejemplo y todo un logro”.

Capacitación internacional

Los profesionales participarán del Curso de Expertos en Tabaquismo, organizado por la Sociedad Española de Neumonología y Cirugía Torácica, que se realizará en Madrid, del 10 al 14 de mayo. Pero también realizarán una rotación en la Unidad Especializada en Tabaquismo de la Comunidad de Madrid, dirigida por el Prof. Dr. Carlos Jiménez Ruiz, quien visitara nuestra ciudad el año pasado, oportunidad en la que ofreció charlas sobre el tema a los profesionales de la salud y a los alumnos de la carrera de Medicina.

“Como miembros de la Asociación Santafesina de Neumonología nos vamos a formar en este tema para poder atender a la población y poder advertirle que esta enfermedad no empieza a los 20 ó 30 años sino antes, porque hoy los chicos están empezando a fumar a los 10 ó 12 años. También se sabe que a los 15 ó 18 años es la época de mayor consumo de tabaco. Es una droga más, como dice el Dr. Jiménez Ruiz”, comentaron.

“El chico que llegó a los 21 años y no fumó o que lo hizo muy espaciadamente es raro que después se haga adicto. Por eso, las tabacaleras están dirigidas casualmente hacia estos grupos más vulnerables, que son los que menos contención tienen tanto del gobierno como de la sociedad”, acotaron.

Asimismo, reseñaron que “200 mil millones de dólares se gastan anualmente en salud por causa del tabaco. Si una parte de esto se destinaría a la prevención sería muy bueno. En España, por ejemplo, el tratamiento para dejar de fumar es gratuito, ya que les conviene más pagar el tratamiento antitabáquico que evitar enfermedades relacionadas con el tabaco como el Epoc, enfermedades cardiovasculares, entre otras, además de muertes”.

Por último, los médicos aseguraron que “la gente debe saber que si quiere se puede dejar el tabaco. Esto le permitirá mejorar la autoestima porque es un logro personal. Por más que el paciente sea un fumador de muchos años y tenga daños pulmonares por el tabaquismo siempre es beneficioso que deje de fumar, ya que no llega a tener las recaídas por Epoc y mejora su capacidad funcional, lo que quizás no se traduce en la evaluación espirométrica pero sí a nivel subjetivo; se siente mejor”.