Imputaron por asociación ilícita y coimas a un alto jefe policial del norte provincial

En el mediodía del lunes en una audiencia presidida por el juez de Investigación Penal Preparatoria (IPP) Gonzalo Basualdo, el fiscal Aldo Gerosa imputó al comisario de rango superior Danilo Iván Barrientos por “organización, explotación y administración del sistema de captación de juegos de azar sin habilitación, asociación ilícita en grado de miembro, cohecho y concusión”, que son exacciones ilegales en beneficio propio. Por los dos primeros hechos también fue imputada su pareja de apellido Martínez.

En la Oficina de Gestión Judicial de Reconquista, el representante del Ministerio Público de la Acusación (MPA) indicó que la investigación comenzó hace un año, con escuchas telefónicas en las que Barrientos y su esposa se comunicaban con personas sindicadas como jefes del juego ilegal de Reconquista. El fiscal aseguró que la pareja actuaba en calidad de miembro de tal organización por la que ya fueron imputados siete jerarcas de la quiniela clandestina, entre ellos el legendario “Pajarito” Rossi.

En cuanto a los delitos de cohecho y concusión referidos a supuestas coimas el servicio de adicionales, figuran conversaciones telefónicas de Barrientos con un funcionario comunal de la localidad de Tartagal (departamento Vera) por la fiesta del pueblo, de donde el fiscal dedujo que el policía recibió beneficios en forma personal, y con el dueño de un local bailable de Reconquista a quien le mandó decir a través de otro policía que “le voy a mandar cuatro adicionales pero le voy a cobrar por seis, los dos restante son en negro”.

Por esto, el juez Basualdo resolvió dictarle la prisión preventiva con modalidad domiciliaria, para la cual su madre será la guardadora en la casa ubicada en el barrio “100 Viviendas”, del sur de Reconquista. Para lograr tal beneficio alegó problemas de salud en el oído izquierdo que le afectan no solo la escucha sino también el equilibrio y la movilidad.

Barrientos fue pasado a disponibilidad luego de ser detenido en su domicilio. Era el jefe de la Inspectoría Zona Norte de la Policía de Santa Fe.

Libertades y domiciliarias

En tanto, en una audiencia de revisión de medida cautelar, pasaron a cumplir prisión preventiva en modalidad domiciliaria cinco de los siete imputados por ser jefes de una asociación que regenteaba el negocio del juego ilegal en la ciudad de Reconquista. Raúl Arraga, Adrián Mai, Marcelo Driussi, Gregorio Ramírez y Santiago Saucedo estaban detenidos en la alcaidía local, pero desde ahora revistarán con prisión domiciliaria.

En tanto, José Sixto Rossi Verdaro, alias “Pajarito”, y Graciana Agustini, que estaban con prisión domiciliaria, recuperaron la libertad con restricciones y tras pagar una fianza de 1,5 millón de pesos cada uno.
Ambos están imputados por haber “ordenado, dispuesto o acordado personalmente el monto y modo de sumas de dinero a funcionarios públicos provinciales no determinados a la fecha para que no investiguen o fiscalicen sus actividades” y, de esa manera, “permitan el desarrollo de la actividad clandestina e ilícita”, sean pertenecientes a fuerzas de seguridad provinciales, nacionales o a la administración de la Lotería de Santa Fe.

También por haber “organizado, explotado y administrado en forma continua y habitual por sí y a través de terceros, que dependían jerárquica, laboral y económicamente de los imputados, un sistema de captación de los juegos de azar con apuestas de dinero”, sin contar con autorización pertinente emanada de la autoridad jurisdiccional competente.

En su momento, el fiscal Gerosa sostuvo que en tales circunstancias organizaron y dirigieron el “levantamiento y captación de apuestas dinerarias para juegos de Lotería y Quiniela oficial usando para la designación de premios los sorteos que realizan los organismos oficiales”, y haber “realizado maniobras de captación de otros juegos de azar por apuestas de dinero, todo dentro de la clandestinidad”.

Y los encartó por “haber actuado en calidad de banqueros o capitalistas, haber financiado la actividad ilegal en su integridad, haberse beneficiado ilegalmente de las ganancias de las apuestas no registradas y de la falta de pago de tasas, tributos y derechos fiscal y administrativos que gravan la actividad en forma legal”.

32 millones

El fiscal regional Rubén Martínez precisó que el movimiento mensual estimado del juego ilegal en la ciudad de Reconquista era de 32 millones de pesos.

El funcionario explicó a El Litoral que esa suma surge de analizar que luego de la clausura de los locales de quiniela clandestina en la ciudad, las agencias oficiales pasaron a facturar de 350.000 a cerca de 800.000 pesos por mes. “Y en Reconquista hay 80 agencias oficiales, así que saquen la cuenta”, expresó.

Martínez detalló además que cursó oficios al Juzgado Federal, a la AFIP, al API, a Lotería de Santa Fe y a Fiscalía de Estado para que participen y se involucren en la investigación por el juego clandestino para de “esta forma atacar lo que es el lavado de dinero, y ver cómo hay personas que cuentan hoy con un patrimonio que no pueden justificar”.

POR GUSTAVO CAPELETTI