“No toco una pelota hace años”: la declaración de Michael Jordan que sorprendió a todos
Volvió la mejor liga de básquet del mundo y con ella, su “G.O.A.T”. MJ se sentó a hablar con Mike Tirico en un nuevo ciclo de entrevistas para la cadena NBC & Peacock y no tardó en dar un fuerte impacto en el mundo del deporte. Mirá la entrevista (subtitulada y traducida).
“No toco una pelota hace años”: la declaración de Michael Jordan que sorprendió a todos
La temporada 80 de la NBA arrancó este martes por la noche con un panorama televisivo totalmente renovado: tras casi 30 años, volvió NBC & Peacock a cubrirla y para conseguir un mayor acercamiento al deporte, decidieron hacerlo de la mano de leyendas de la liga y otros periodistas.
Entre nombres históricos como Carmelo Anthony,Vince Carter, Jamal Crawford y Tracy McGrady, se coló un tal Michael Jeffrey Jordan… solían decirle “His Airness”, en referencia a “His Highness” (su alteza en español).
El escolta que prendió fuego a la NBA en los 90, ganando 6 títulos en menos de 10 años y consagrandose el MVP de la temporada cinco veces, estaba alejado de la liga desde hace varios años. Pese a ser dueño mayoritario de los Charlotte Hornets por casi dos décadas, MJ no solía hablar mucho con los medios ni mucho menos hacer apariciones públicas.
En la pandemia rompió la matrix del básquet cuando lanzó la docuserie “The Last Dance”, que retrataba el ocaso de la dinastía de los Bulls y mostraba a un clásico Jordan sin pelos en la lengua y “políticamente incorrecto” a la hora de hablar sobre esos años. Algo que a la mayoría de los fans del deporte les encantó.
Esta vez, la NBA distribuyó los derechos de la liga en varias compañías y así, NBC & Peacock retomó el dominio audiovisual que tenía hace 30 años, como si no hubiera pasado ni un sólo día en el medio.
Volvieron los colores, las entrevistas personales, sin dramatismos innecesarios y con análisis hechos por los verdaderos expertos del juego: los jugadores que se ganaron un lugar en el Salón de la Fama.
En el segundo punto es donde Michael, sentado en el mismo sillón donde dijo "y lo tomé personal", volvió para mostrar un lado que había tocado pocas veces en su vida pública: sus sentimientos y su conexión total con el básquet, casi como si estuviera hablando de una adicción.
Su tocayo, Michael “Mike” Tirico, fue quien tuvo el honor de llevar a cabo la entrevista. El ciclo se llama “MJ: Insights To Excellence” y ayer tuvo su primera emisión previo al comienzo formal de la temporada número 80 que vio a los Oklahoma City Thunder vencer épicamente a los Houston Rockets, además de la sorpresiva victoria de Warriors ante Lakers.
Mike Tirico, el entrevistador
El paso del tiempo
Allí, la emisora golpeó con nostalgia pura: una intro de una televisión perdida en el tiempo, con la música y las gráficas noventéscas acompañando a las jugadas históricas de MJ, que de un momento a otro ilusionaron a más de uno con ver un clásico partido de los Bulls.
Pero no, tras la intro no hubo un partido, hubo una entrevista a la que le bastaron 3 minutos para dejar a los fanáticos con ganas de más.
“Es increíble, realmente cuando estás en el pico de tu carrera no te das cuenta el poco tiempo que tenés para tu familia… tal vez por eso no escuchan seguido de mí”, dijo Jordan, casi respondiendo directamente a los que alguna vez nos preguntamos “¿Dónde estará Michael?”.
“El tiempo es lo más valioso que tengo ahora. Ese tiempo lo uso para estar con mi familia, que es algo que perdí por muchos años” aseguró MJ.
Al instante y sin vueltas, Tirico le preguntó: “¿No tiras al aro de vez en cuando?” y llegó una confesión que en los 90’s sería un chiste.
“Hace años que no toco una pelota”, respondió Jordan con su característica seriedad y algo de ansiedad, mirando hacia un costado, como soñando despierto o repitiendo ese tiro sobre Bryon Russell en el 98.
“Hace años que no toco una pelota”
Tirico, sorprendido como cualquier persona viendo el video le re-pregunta con una sonrisa nerviosa: “Alguna pelota y aro debes tener por acá cerca o en la casa”. MJ fue conciso: “¿Ves algún aro acá?”. “No, no veo ningún aro acá, pero al menos decime la última vez que tiraste al aro” contestó el entrevistador.
Michael se tomó un segundo para pensar y acariciando el sillón encontró aquella última vez.
Durante la Ryder Cup, el histórico torneo de golf, el mítico escolta le alquiló la casa -que tiene un aro de básquet- a una familia local y el dueño hizo el pedido que haríamos todos en su posición: “Quiero que tires un tiro libre”. “¿En serio?”, preguntó MJ.
Y, obviamente, lo tiró. “Cuando me paré en la línea para tirarlo, fue lo más nervioso que estuve en años, en años”, aseguró. La razón, según Mike, es que como estaban los nietos del dueño viéndolo, él tenía que mostrarles que los cuentos que le contaron sus padres sobre su leyenda, eran ciertos. Que su dominio en los 90 no fue casual. Que es Michael Jeffrey “His Airness” Jordan.
-Tirico: “Espero que haya sido todo red”
-MJ:“Obvio. Fue lo más gratificante que me pasó en semanas”
"Tengo una obligación con el deporte"
“Es una obligación”
Tirico retomó el ausentismo mediático de MJ y le consultó: “¿Por qué ahora sí? ¿Por qué volver ahora?”.
“Porque tengo una obligación con el básquet. No financiera. Tengo una obligación como exjugador de compartir el básquet, de dar mensajes sobre el deporte”, afirmó Michael.
-Tirico: “¿Todavía amas el básquet?”
-MJ: “No te imaginás lo que amo y extraño el básquet, desearía tomarme una pastilla mágica que me deje jugar hoy en día. Porque así soy yo. Extraño mucho poder desafiarme a mí mismo y a lo que la gente cree que es buen básquet… pero es mejor estar acá sentado sin riesgo de lesionarme y quedarme en una silla de ruedas”.
-Tirico: “Pero es importantísimo que puedas compartir sobre básquet hoy en día”
-MJ: “Sí, como deportistas tenemos la obligación de hacerlo para que el deporte siga creciendo”
Michael mostró su lado más humano y sensible. Al borde de las lágrimas y con otras palabras o gestos admitió que el básquet para él casi una adicción. Un pensamiento recurrente que tiene que reprimir por su bien y el de su familia.
Tres minutos y medio le alcanzaron para cautivar a las audiencias masivas. Esta vez no fue con una volcada, una bandeja imposible o un tiro con una mano en la cara. Fue con sus palabras y su corazón… que seguro tiene forma de pelota de básquet.