Al menos 500 personas murieron quemadas ayer cuando una tubería de combustible rota por ladrones explotó en Lagos, la mayor ciudad de Nigeria, dijeron trabajadores de emergencia. Cientos de residentes del distrito de Abule Egba, fueron a extraer combustible utilizando recipientes plásticos después de que ladrones perforaron el ducto durante la noche. "Estamos hablando de cientos (de muertos). Aún tenemos que confirmar la cifra de víctimas, por lo que no sabemos si son 300, 400 ó 500", dijo el secretario general de la Cruz Roja, Abiodun Orebiyi, agregando que hay un centenar de heridos graves con quemaduras que hacen peligrar sus vidas, según lo consignado por la agencia ANSA. Un testigo vio que cientos de cuerpos, la mayoría carbonizados, yacían en el sitio de la explosión mientras los trabajadores de emergencia intentaban apagar el fuego. Un voluntario de la Cruz Roja en el lugar dijo que "muchas personas han resultado carbonizadas. El suelo estaba cubierto por los cuerpos". Un grupo de mujeres lloraba sobre un banco cercano. "Un amigo llamó a nuestra puerta y le dijo a mi marido que iban a recoger combustible. Mi marido se fue corriendo con dos cubos y ahora no está. Esto es una maldición de Dios", dijo una mujer llamada Ole. Una explosión similar causó la muerte de alrededor de 200 personas en mayo pasado, en otra zona de Lagos. El vandalismo contra los ductos y el robo de combustible es común en Nigeria, el octavo mayor exportador de crudo del mundo, donde la mayoría de la gente vive en la pobreza. Expertos de la industria calculan que alrededor del cinco por ciento de la producción de crudo del país se roba para ser exportada por grandes sindicatos que tienen contactos en el Ejército y el gobierno. (Télam).































