EPE: cortes por maniobras para cuidar la red eléctrica

Son cortes breves, pero se sienten. En cualquier caso, no pueden compararse con los interminables apagones de otras épocas, que alteraban los ánimos y congelaban cada minuto. En el último mes, por unos minutos la luz se va y, ante su ausencia, los usuarios residenciales toman conciencia de su cotidiana presencia.

“Son cortes preventivos, los hacemos para hacer maniobras en la red de media tensión que nos permiten evitar males mayores”, dijo el gerente de Relaciones Institucionales de la EPE, Raúl Stival, en diálogo con El Litoral.

“Tenemos un invierno con 5 grados menos de promedio que el del año pasado, con una demanda que crece y que cuando se producen estas bajas temperaturas produce picos en la demanda de potencia”, subrayó el ingeniero Stival.

“Este aumento en la potencia hace que nuestras redes -siguió- trabajen con una mayor carga. Y si bien los picos no llegan a los valores históricos de demanda que tenemos, por ejemplo, en verano, nos obliga a hacer maniobras sobre la red de media tensión para evitar problemas mayores.

“Mediante operaciones de telecomando o manuales buscamos restablecer el equilibrio en las cargas, para que no se quemen los cables. Y para hacer estas maniobras deben producirse interrupciones en el servicio, que pueden extenderse por entre 4 y 10 minutos, y tienen, insisto, la finalidad de que no haya una complicación mayor”.

Stival subrayó que “para enfrentar la demanda propia del invierno la empresa debe recurrir a esta operación dinámica de la red: en general los cortes tienen esa breve duración, pero puede ser mayor en zonas en las que no exista la posibilidad de operar por telecomando las cargas”.

Si bien el funcionario comentó que no cuenta aún con cifras estadísticas sobre la situación actual, subrayó que la EPE tiene un registro de sus interrupciones en el servicio, el Siais, Sistema Informatizado de Análisis de Interrupción del Suministro, “que nos permite incluso compararnos con otras empresas”.

“Probablemente, haya un porcentaje de unos pocos puntos, imaginemos de 3 o hasta 5% más de interrupciones, y seguramente todos coincidiremos en que es un guarismo bajo, menos quienes viven en las zonas donde más se deben hacer estas maniobras... Sin dudas en esos hogares repercute, y es una molestia que lamentablemente no podemos evitar. Todo lo que podemos decirles es que lo hacemos para evitar males mayores”.

Inversión

El Litoral preguntó a Stival por qué la red no tiene la capacidad de enfrentar estos picos, sin estas maniobras de carga que implican hacer cortes, que -aunque breves- afectan a los usuarios.

El vocero de la EPE dijo que desde el punto de vista técnico es perfectamente posible, pero advirtió que las instalaciones eléctricas -como casi toda la infraestructura de servicios públicos- es producto de cálculos técnicos “pero también económicos”.

“En definitiva es el usuario quien paga las inversiones y hay que ver si la sociedad está dispuesta a soportar unos costos bastante más elevados. Podría por supuesto hacerse una red con el doble de seguridad que la existente pero sería económicamente inviable. De todas formas, hay un programa de inversiones en marcha, que se cumple durante esta gestión y que terminará en 2012. Con esas obras vamos a estar más cerca de tener la red que debería tener la EPE, para un funcionamiento mejor”.

Stival explicó que habrá más centros distribuidores por lo que deberán atender un número menor de subestaciones transformadoras, lo que en definitiva reducirá el riesgo eléctrico.