Sin incidentes, se agotaron las plateas

Las 5.600 plateas que se pusieron a la venta para el partido entre los seleccionados de Argentina y Brasil, que se jugará el sábado en la cancha de Rosario Central, se agotaron esta tarde, según informó el personal de boletería, en medio de un correcto operativo policial.

Las ventanillas se abrieron a las 9.15 y el expendio se extendió hasta pasadas las 17, mientras se alistaba la nueva cola para la venta de populares del próximo viernes, que también se podrán conseguir en el estadio de Newell’s Old Boys.

Las plateas se vendieron a un ritmo lento y a las 15.30 ya no había cola, cuando restaban vender 200 plateas, que finalmente se agotaron una hora antes del cierre programado de las boleterías.

Los siguientes fueron los valores de las plateas que gente de todas las provincias pudo pagar para ver a sus ídolos el próximo sábado: Cordoviola Alta (250 pesos), Rio Alta (250), Platea Cordiviola Baja (300), Rio Baja (300), Cordiviola Baja C-D (350), Cabecera Sur Baja (100), estas últimas se agotaron en una hora.

La policía rosarina informó ayer por la tarde que no serían 12 mil las plateas como estaba previsto, y el encargado del operativo, Osvaldo Toledo, le aseguró a Télam que serían 4 mil y temía por incidentes porque los hinchas se acercaron en gran número.

Alrededor de las 11 llegaron las restantes 1.500 plateas, y con las boleterías abiertas se calmó el ánimo de los impacientes que acamparon desde el lunes pasado.

‘Temíamos que haya problemas por la reducción de entradas, la gente fue avisada con anterioridad pero no se le puede prohibir hacer la cola. Apelamos a la conciencia de la gente y todo salió bien“, aseguraron fuentes policiales a Télam.

A pocos metros de conseguir una localidad, cuatro personas se desmayaron a lo largo del día, aunque fueron atendidos y pudieron reinsertarse en la apretada fila.

Antes de que se abran las boleterías, dos mujeres de 35 años fueron alzadas por el público y llevadas delante de todo, y una vez atendidas consiguieron su platea antes que nadie.

En tanto dos jóvenes agobiados por el calor de la fila se acercaron a una ambulancia por sus propios medios y no volvieron, con la certeza de que estarán presentes alentando a la Argentina porque había familiares y se pudieron adquirir dos entradas por persona.

Más allá de la extensa fila que rodeó el Gigante de Arroyito y se extendió por ocho cuadras, el marco general presentó a los vendedores oportunitas con banderas celestes y blancas y camisetas con el nombre de Messi.

A un costado, estuvieron bien ubicados los simpatizantes que llegaron exclusivamente para adquirir populares, que llevan consigo todos los elementos para que la proeza de esperar hasta el viernes se haga más llevadera en una cola paralela.

También pudieron convivir en ese contexto hinchas de Central y de Newell’s, que se olvidaron de la rivalidad de cara al decisivo encuentro del seleccionado argentino por meter un pie en la próxima Copa del Mundo Sudáfrica 2010.

La lluvia que cayó a primera hora obligó a los hinchas a cubrirse, y fue en ese momento cuando aparecieron los paraguas con los colores 'canallas’ y las banderas 'leprosas’ para proteger las cabezas.

Tampoco faltaron los abrigos de Boca, River, Racing y San Lorenzo, demostrando que en fecha de eliminatorias todos son hinchas de la selección.

Además se hicieron presentes en las inmediaciones del estadio barras bravas de Central, con el líder Andrés Bracamonte, alias ‘Pillín’, junto a un grupo de ocho personas, algo que se podría repetir el viernes en el estadio 'Coloso’ con los hinchas de Newell’s.

Télam