El destructor USS Gravely atracó en Trinidad y Tobago este domingo, según reportes de agencias internacionales. Este arribo se enmarca en un despliegue naval más amplio de los Estados Unidos en el Caribe, especialmente dirigido hacia zonas próximas a la frontera marítima de Venezuela.
Autoridades trinitenses y estadounidenses señalaron que la misión oficial incluye entrenamientos conjuntos para combatir el narcotráfico y los flujos ilícitos marítimos, aunque analistas ven un trasfondo geopolítico de presión de Donald Trump sobre Nicolás Maduro.
Desde el gobierno de Trinidad y Tobago, la primera ministra Kamla Persad‑Bissessar apoyó la presencia del buque argumentando que su país “no es una zona de paz” debido al aumento de la violencia en la región.
Vista del USS Gravely en el puerto de España, Trinidad and Tobago. Crédito: REUTERS / Andrea De Silva.En cambio, en Caracas se percibe esta maniobra como una provocación: el presidente Maduro denunció que el despliegue tiene como objetivo “fabricar un conflicto eterno” en torno a Venezuela.
Despliegue del Pentágono
El arribo del Gravely y otros buques de guerra refuerza la percepción de que EE.UU. busca consolidar su presencia militar en el Caribe, tanto con fines de seguridad como de influencia. Esto afecta directamente la dinámica con países limítrofes como Venezuela, cuya soberanía marítima siente la presión.
Además, la cooperación entre EE.UU. y países insulares caribeños como Trinidad y Tobago para operaciones de control de drogas o tráfico se entrelaza con temas más amplios de política internacional: ¿es solo seguridad o también contención?
El buque permanecerá en aguas de Trinidad y Tobago varios días para entrenamientos conjuntos, según fuentes oficiales. La atención estará puesta en los movimientos que siga el destructor, y en cómo reaccione Venezuela ante lo que puede considerarse un nuevo eje de tensión militar en la región.
La respuesta de Maduro
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció que el Gobierno de Estados Unidos estaría “inventando una nueva guerra” y advirtió que los países del sur del continente actuarán unidos para impedirla.
Nicolás Maduro, presidente de Venezuela. Crédito: REUTERS / Leonardo Fernandez Viloria.Durante un mensaje transmitido por la televisora estatal, Maduro afirmó que “el pueblo estadounidense sabe que su gobierno está inventando una nueva guerra. Ellos prometieron que nunca más se meterían en una guerra, pero se están inventando una que nosotros vamos a evitar”.
El jefe de Estado aseguró que su país, junto con las naciones vecinas, evitará cualquier intento de conflicto bélico mediante la organización social y la solidaridad regional. “América del Sur y el Caribe entero dicen: ¡No a la guerra, sí a la paz, sí a la prosperidad, sí a la armonía y a la convivencia!”, subrayó.