Rusia: descubrió que su amigo había abusado de su hija de 6 años y lo obligó a cavar su propia tumba

Un individuo oriundo de la región de Samara, al suroeste de Rusia, encontró en el celular de un amigo imágenes explícitas del abuso sexual que el sujeto perpetró contra su hija, situación que derivó en un acto de “justicia por manos propias”.

Según lo detalló la prensa local, el papá de la pequeña de 6 años que fue víctima de la agresión sexual, encontró en el teléfono de Oleg Sviridov (32) el material que mostraba el abuso contra la menor. Luego, fue hallado el cadáver de Sviridov con una puñalada en la espalda y las autoridades procedieron a la detención del progenitor de la pequeña víctima.

No obstante, el sospechoso del crimen negó la acusación de homicidio: no se declaró culpable de este hecho, aunque sí brindó un dato escabroso a la justicia al admitir que había obligado a Sviridov a cavar su propia tumba antes de morir, pero aseguró fue solo para asustarlo.

Por su parte, los análisis preliminares de los forenses no pudieron establecer la culpabilidad del padre de la menor por lo que las autoridades retiraron los cargos por asesinato aunque mantuvieron los de incitación a la muerte del abusador. El caso ocurrió hace dos años, pero ahora la Justicia se expidió sobre la presunta inocencia del hombre en la acusación por homicidio de Sviridov.

Según informes, el padre obligó a Sviridov a cavar su tumba. Después, el abusador intentó acuchillarlo, pero el hombre se defendió con una pala. Finalmente, según la declaración de la esposa, Svidirov se habría acuchillado a sí mismo. Tras enterrar a su amigo, el padre entregó el teléfono a la policía pero no mencionó que el abusador estaba muerto.

Apoyo al padre de la menor

Cerca de 2500 personas se manifestaron en la región de Samara a través de una carta que firmaron para pedir la absolución del padre de la menor. Además, los vecinos lo tildaron de ‘héroe’ por “liberar a la región” de un abusador. Se cree que otros dos niños del poblado habrían sido abusados por Oleg Sviridov.